Valle
Con avistamiento de aves y visitas a manglares, el Pacífico busca fortalecer el turismo local
En Buenaventura se realizó el Primer Encuentro de Turismo Comunitario.

29 de jul de 2025, 10:48 a. m.
Actualizado el 29 de jul de 2025, 04:28 p. m.
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Los encantos naturales del Litoral Pacífico son ampliamente buscados por viajeros colombianos y del exterior ávidos de adentrarse en playas, ríos, cascadas, manglares, aguas termales y selvas, así como de interactuar con las comunidades locales.
Pero no hay que desconocer que en estos territorios hay necesidades insatisfechas, las cuales se quieren suplir para brindar experiencias aún más cautivadoras al visitante.
Estas inquietudes fueron expuestas en el Primer Encuentro de Turismo Comunitario, que congregó en Buenaventura a diversas organizaciones turísticas comunitarias y consejos comunitarios de Nariño, Cauca, Valle del Cauca y Chocó.
Catalina Gaviria, profesional de turismo del proyecto Pacífico Biocultural, de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura, FAO, afirmó que articularon “diferentes actores, como la Alianza Pacífico, el Ministerio de Comercio, Industria y Turismo; la Alcaldía de Buenaventura, la Universidad del Pacífico, la CVC, WWF y el Fondo Minga, para la realización de este Encuentro, que marca un hito para el turismo en el país”.

Según explicó, en él “se reafirmó la necesidad de generar una política pública nacional que permita tomar acciones y decisiones encaminadas a una gestión diferencial del turismo en territorios colectivos de comunidades negras del Pacífico”.
Lo anterior, continuó, “propiciando el diálogo, la articulación y el intercambio para la construcción colectiva de insumos (principios, objetivos y estrategias) para dicha política”.
Gaviria agregó que este es un primer paso en el cual se dejó una mesa de trabajo instalada con representantes de estos departamentos, con el propósito de que puedan seguir acompañando al Ministerio de Comercio, Industria y Turismo en el diseño de la política gubernamental.
Gobernanza y conservación
Durante el evento, Santiago Valencia, líder del Consejo Comunitario de Bahía Málaga-La Plata, se mostró optimista por esta apuesta que “fortalece la conservación, el turismo sostenible (no depredador), y que permite que las familias puedan quedarse a vivir permanentemente en su territorio”.
El también vocero de la Alianza de Turismo del Litoral Pacífico dijo que el objetivo es que las actividades del sector no generen pérdida del territorio y que desean “ser empresarios del turismo de base comunitaria; que sean las comunidades las protagonistas, las que se empoderen de su quehacer”.
Factores como la sobreexplotación y el cambio climático han reducido la actividad pesquera en aguas del mar Pacífico, afirmaron pobladores de Punta Soldado, a 30 minutos en lancha desde Buenaventura.

Esta situación les mostró una nueva oportunidad económica, al brindarles la posibilidad a los viajeros de adentrarse en los paisajes de esta isla, hacer avistamiento de aves; visitar sus manglares, apreciar la piangua y otras especies nativas; conocer sobre la partería ancestral y alojarse en sus cabañas, entre otros servicios que ofrece el proyecto Playa Viva.
En esta vasta región pacífica también hay desafíos relacionados con presencia de economías ilícitas, que cambian y rompen el tejido social; falta de coherencia en el equipamiento en territorios bioculturales (energía limpia, manejo de residuos y agua potable), y carencia de una educación pertinente, como lo advirtió Josefina Klinger, al asegurar que “nuestros niños tienen que crecer amando la biodiversidad, pero a la educación de hoy le falta contexto”.
Esta lideresa creó en 2006 la organización Mano Cambiada, en Nuquí (Chocó), para promover el desarrollo social en comunidades rurales a través del turismo.

Asimismo, Klinger reseñó la complejidad y a la vez la oportunidad que supone el mosaico de la propiedad colectiva de “los territorios del Pacífico, pues hay tierras de comunidades negras, pero también de comunidades indígenas, así como zonas de amortiguación de áreas protegidas”.
Finalizado el encuentro, y con un cúmulo de aprendizajes, los participantes zarparon satisfechos a sus hogares para seguir haciendo lo que mejor saben: cautivar al turista que arriba a paraísos como el parque Venado Verde, en la vía a Buenaventura; Mamá Orbe, en Bahía Solano; en este mismo municipio chocoano, a la organización Red de Frío Bahía Solano, dedicada a la pesca y que incursiona en turismo para ofrecer la pesca artesanal como un atractivo.
Guapi Tour, en Cauca, y Boca Grande y Cabo Manglares, en Nariño, engrosan la lista de joyas marino costeras. No podía faltar el Parque Nacional Natural Utría (Chocó), escogido por las yubartas para dar a luz a sus crías, por lo que es llamado la ‘sala de partos’ de las ballenas.
Ruth Emilse Castro, líder de turismo comunitario del Viceministerio de Comercio, Industria y Turismo, aseguró que el encuentro en Buenaventura fue un primer paso que servirá como insumo para construir la política pública que se requiere para que las comunidades del Pacífico sean visibilizadas.
Resaltó que “tienen un capítulo muy importante en nuestro plan sectorial de turismo, donde debemos apostarle a sus iniciativas y experiencias”.
Anunció también la conformación de una mesa técnica y de seguimiento con dos delegados por departamento para conformar la escuela de turismo. “Porque para que haya una oferta adecuada y sostenible, debemos educarnos”, puntualizó la funcionaria.