Las formas más comunes en las que los hackers roban información bancaria

Los hackers representan una amenaza significativa en el mundo digital actual, donde gran parte de la información personal, financiera y empresarial se encuentra almacenada en línea. Sus acciones pueden tener consecuencias graves, tanto a nivel individual como global, afectando desde la privacidad de las personas hasta la seguridad de sistemas gubernamentales.

A continuación, varias formas en las que los hackers roban información bancaria:

Phishing

Los hackers envían correos electrónicos, mensajes de texto o enlaces falsos que parecen provenir de instituciones bancarias legítimas. Estos mensajes buscan engañar a los usuarios para que proporcionen información confidencial como números de cuenta, contraseñas o datos de tarjetas de crédito.

Keyloggers

Se instalan programas maliciosos en dispositivos de las víctimas que registran las pulsaciones del teclado. De esta forma, los hackers capturan credenciales bancarias y datos sensibles sin que la víctima lo perciba.

Malware financiero

Los cibercriminales utilizan software malicioso que se introduce en los dispositivos, generalmente a través de descargas no seguras o correos electrónicos infectados. Este malware puede interceptar datos bancarios mientras se introducen en páginas web.

Ataques a través de redes Wi-Fi públicas

Los hackers aprovechan redes Wi-Fi no seguras para interceptar datos de las personas que acceden a sus cuentas bancarias mientras están conectadas. Estos ataques suelen realizarse mediante técnicas como el “man-in-the-middle,” que permite capturar la información que se transmite.

Clonación de tarjetas

A través de dispositivos llamados “skimmers,” instalados en cajeros automáticos o terminales de pago, los hackers copian la información de la banda magnética de las tarjetas bancarias.

Suplantación de identidad (Identity theft)

Los atacantes obtienen información personal como nombres, direcciones y números de identificación para acceder ilegalmente a cuentas bancarias o abrir nuevas cuentas a nombre de la víctima.

Ataques a instituciones financieras

Los hackers también dirigen sus esfuerzos hacia bancos y plataformas financieras para vulnerar sus sistemas y obtener datos de miles de clientes de forma masiva.

Ingeniería social

Mediante técnicas psicológicas, los cibercriminales manipulan a las víctimas para que compartan voluntariamente información bancaria, haciéndose pasar por empleados bancarios o técnicos de soporte.

Falsificación de sitios web

Los hackers crean páginas web falsas que imitan las de bancos legítimos. Las víctimas ingresan sus credenciales creyendo que están en un sitio seguro, entregando así su información directamente al atacante.

Ataques de fuerza bruta

Este método consiste en probar múltiples combinaciones de contraseñas hasta adivinar la correcta, especialmente si se utilizan contraseñas débiles o predecibles.

Cómo protegerse:

• Verificar siempre la autenticidad de correos y mensajes antes de proporcionar datos.
• Usar contraseñas fuertes y únicas.
• Habilitar la autenticación de dos factores.
• Evitar el acceso a cuentas bancarias desde redes Wi-Fi públicas.
• Mantener dispositivos y software actualizados para protegerlos de vulnerabilidades.