‘Gabriela’ confesó cuánto costó el arma importada con la que le dispararon a Miguel Uribe; “un juguetote”

Luego de dar con las cuatro capturas de los sospechosos de perpetrar el ataque al congresista y precandidato presidencial Miguel Uribe, se ha empezado a desvelar el misterio alrededor de una de las piezas más importantes de toda la investigación: el arma con la que se atentó contra su vida y que lo tiene desde hace más de dos semanas entre la espada y la pared en la Fundación Santa Fe, en Bogotá.

El arma, una Glock calibre 9mm, fue llevada por alias ‘Gabriela’ el día del crimen. Según confesó, esta ya le había hecho dos encargos similares a alias ‘El Costeño’: que recogiera una pistola y la entregara en cierto punto. En el caso del atentado contra Miguel Uribe fue diferente.

En aquel momento, ella ya tenía en su poder la Glock. Luego de recibir una llamada con las indicaciones del sitio al que tenía que dirigirse, la guardó en una talega de las que se reparten en las tiendas ARA y, luego de ponérsela en la cintura, logró pasar desapercibida.

A continuación pidió un servicio de transporte y llegó hasta el barrio Modelia, donde se encontró con ‘El Costeño’ y se fueron en el carro que aparece en los videos que han salido a la luz.

“Élder me dijo que sacara el arma, textualmente dijo: ‘Saca a la niña’. Yo saqué el arma de la pretina del pantalón, exactamente del lado del abdomen, y como a mí me dijeron que no la fuera a tocar, que no le fuera a oprimir nada porque no tenía seguro, yo la tomé de la parte de arriba, no del mango, sino de arriba y se la entregué a Élder”, señaló.

‘El Costeño’, según lo que cuenta, manipuló el arma y la dejó lista para que el joven sicario solo tuviera que accionarla. “Élder le dijo al muchacho que no le fuera a oprimir nada porque él ya se la había programado para seguido, no tiro a tiro, como en ráfaga”, precisó alias ‘Gabriela’.

A continuación, les dijo a los ocupantes del vehículo cuánto dinero les había costado la Glock calibre 9 mm. “Élder empezó a hablar del arma, que venía del extranjero y que era una Glock, que había costado como 15 o 20 millones, que era un juguetote”, recuerda que les contó.

Según las investigaciones que han hecho la Policía y la Fiscalía, los primeros registros de la pistola son del 6 de agosto de 2020. Ese día, un ciudadano identificado como Charles Joe Anderson la compró de manera legal en Arizona, Estados Unidos.