Política
Estos son los retos que enfrentará Luz Adriana Camargo como cabeza de la Fiscalía General de la Nación
Seguir con el caso en contra de Nicolás Petro es solo uno de los desafíos que tendrá la nueva Fiscal General.
Por Olga Lucía Criollo, Editora Política
“Actuar sin sesgos políticos para evitar que la Fiscalía se convierta en un instrumento del Gobierno; revisar los procesos que su antecesor engavetó o dilató; recuperar la confianza ciudadana en el ente acusador; luchar contra la modalidad de multicrimen existente en el país y bajar la impunidad delictiva que hay en Colombia”.
Estos son, en opinión del politólogo Jhon Mario González, los principales retos que deberá enfrentar durante los siguientes cuatro años Luz Adriana Camargo, elegida ayer como nueva fiscal general de la Nación, en reemplazo de Francisco Barbosa, cuyo periodo se venció en febrero pasado.
Se refiere el analista a los casos por la muerte de Jorge Enrique Pizano y su hijo Alejandro y en general a las investigaciones relacionadas con el entramado de Odebrecht, incluida la financiación de la campaña de Juan Manuel Santos en el 2014.
Una compleja lista a la que se suman los pedidos de preclusión del ente acusador con respecto a los presuntos delitos por los que se investiga al expresidente Álvaro Uribe y el caso del Ocad-Paz, “en el que funcionarios de Planeación Nacional, la Contraloría General, congresistas, mandatarios locales y contratistas habrían creado un entramado de corrupción para quedarse con los recursos para la implementación de la paz, que fue denunciado en 2022″, dice González.
Y también los procesos que se iniciaron el año pasado cercanos al actual mandatario Gustavo Petro, tras las polémicas declaraciones entregadas a la revista Semana por Day Vásquez, ex esposa de su hijo mayor Nicolás, que para entonces era diputado de la Asamblea del Atlántico.
Como se sabe, la Fiscalía de Barbosa lo llamó a juicio por los delitos de lavado de activos y enriquecimiento ilícito, luego de él aceptara ante el fiscal auxiliar Mario Burgos que recibió altas sumas de dinero de parte de dos exnarcotraficantes que estarían destinadas a la campaña de su papá.
Estas denuncias habrían sido corroboradas por el entonces embajador de Colombia en Venezuela Armando Benedetti, en conversaciones con Laura Sarabia, para la época jefa de Gabinete y hoy directora del Departamento Administrativo de la Presidencia, Dapre.
Meses después, el ente acusador avaló un principio de oportunidad con Day Vásquez, quien se comprometió a contar detalles de cómo ‘amasaron’ la fortuna con Nicolás Petro Burgos y la financiación que recibieron de los señalados narcotraficantes.
Sobre la impunidad
Un gran desafío de la nueva Fiscal General de la Nación será “determinar claramente qué entiende la Fiscalía por impunidad, explicar cómo se construye ese indicador y recolectar información robusta para medirlo”, plantea, a su vez, el centro de estudios jurídicos y sociales Dejusticia.
Agrega en su portal que “sin un indicador adecuado, no sabremos si es cierto o falso (como ocurría con Barbosa), cuando nos hablan del éxito de la lucha contra la impunidad”.
De igual forma los expertos plantean que durante la pasada jefatura del ente acusador se registró “una alta tasa de denuncias archivadas” y resalta que la Corporación Excelencia en la Justicia registró un 81 % de casos ‘engavertados’.
“Se dice incluso que buena parte de su estrategia de descongestión consistió en incentivar el archivo de los procesos. Esto es inquietante, porque apunta a que la enorme mayoría de los reclamos de justicia penal de la ciudadanía no están siendo resueltos de fondo”, dice también Dejusticia, al enumerar los retos que, en su concepto, tendrá Luz Adriana Camargo.
De igual forma, y en consonancia con lo expuesto por Jhon Mario González, el centro de estudios jurídicos y sociales plantea que “algunos de los anteriores fiscales han usado la Fiscalía como plataforma para defender sus intereses personales o promover sus agendas políticas, lo cual ha afectado la independencia, la imparcialidad y la eficiencia de la institución”.
Por lo tanto, según esta fuente, uno de los grandes retos de la nueva Fiscal General “será restaurar la defensa de la institucionalidad al interior de la Fiscalía, dejando claro que las instituciones deben estar por encima de las ambiciones de los/las jefes de turno”.
Dejusticia también indica que, cuando se da la situación arriba mencionada, “puede desencadenar una desconfianza más amplia por la justicia y por la democracia. Es esencial recuperar la confianza en la Fiscalía, especialmente si consideramos que somos un país que está tratando de superar la guerra y, en un contexto así, es fundamental que la ciudadanía confíe en la justicia”.
Y finalmente propuso que el hecho de ofrecer datos abiertos y completos sería una muestra del compromiso de la nueva titular del ente acusador con la transparencia, la rendición de cuentas y el fortalecimiento de la democracia: “Estos datos le permitirían a la ciudadanía hacer veeduría sobre el desempeño de la Fiscalía, para entonces diagnosticar y debatir públicamente sobre lo que funciona bien y lo que podría mejorarse”.