Tras confirmación de condena de la Corte Suprema por caso Odebrecht, exsenador Antonio Guerra se entregó a las autoridades

El exsenador Antonio Guerra De La Espriella se entregó en las últimas horas a las autoridades luego de que la Sala de Casación Penal de la Corte Suprema de Justicia confirmara parcialmente su condena por las gestiones ilegales que adelantó para favorecer a la multinacional Odebrecht con la firma del contrato de estabilidad jurídica.

El alto tribunal confirmó la sentencia de 11 años y cinco meses de prisión por los delitos de enriquecimiento ilícito y tráfico de influencias. Asimismo, ordenó su captura inmediata y fijó una multa de $1.175 millones de pesos, además de una inhabilidad para ejercer cargos públicos durante 10 años y cinco meses.

“La Sala procederá a tasar nuevamente la inhabilitación para el ejercicio dederechos y funciones públicas, que es consagrada como penaprincipal para los punibles incluidos en la condena”, definió la Corte.

Guerra De La Espriella había sido inicialmente condenado por la Sala Especial de Primera Instancia por enriquecimiento ilícito, tráfico de influencias y concierto para delinquir agravado. Sin embargo, la Sala de Casación Penal lo absolvió de este último delito al resolver el recurso de apelación interpuesto por su defensa.

En su decisión, la Corte señaló que Odebrecht se interesó en obtener un contrato de estabilidad jurídica que garantizara beneficios tributarios. Para lograrlo, dispuso recursos económicos y acudió al exsenador Otto Bula, con el objetivo de influir en funcionarios públicos a través de pagos.

Según el fallo, el exsenador Bernardo Elías actuó como intermediario para coordinar sobornos a congresistas.

“La multinacional se había interesado en el contrato de estabilidad jurídica (que da garantías tributarias a las empresas) al punto que dispuso considerables sumas de dinero para obtenerlo y acudió al exsenador Otto Nicolás Bula Bula para que influyera en servidores públicos con el fin de conseguir su apoyo a cambio de pagos. Para lograr su objetivo, el exsenador Bernardo Elías Vidal habría actuado como articulador para sobornar a los legisladores”, explicó el alto tribunal en el documento de su fallo.

La Sala concluyó que Antonio Guerra participó en estas gestiones ilegales aprovechando su condición de congresista. Indicó que recibió dinero a cambio de intervenir en la aprobación del contrato de estabilidad jurídica, lo cual se evidenció en el incremento injustificado de su patrimonio.

Aunque en la primera instancia Guerra fue hallado responsable de concierto para delinquir agravado, la Sala Penal lo absolvió de este delito al considerar que no se acreditó su participación en una organización criminal. Esta decisión redujo la pena inicialmente impuesta, que contemplaba una condena mayor.

La Corte Suprema de Justicia ya ofició a las autoridades competentes para hacer efectiva la captura del exsenador, quien deberá cumplir su condena privado de la libertad en centro carcelario.

*Con información de Colprensa y redacción de El País