Valle
“No puedo remediar el pasado, pero sí pedir perdón al Valle por todos los crímenes cometidos”
Antiguo hombre fuerte del cartel del Norte del Valle niega que siguiera delinquiendo luego de pagar una condena en Estados Unidos.
Tras diez años de haber sido extraditado a los Estados Unidos para pagar una condena por el delito de narcotráfico, Jerson Enrique Camacho, alias Flaco Jerson, regresó a Colombia en el 2021 y se radicó fuera de Cali.
La razón, lo explica él mismo, es porque “estoy viviendo una vida distinta y casi no voy a Cali para que ni me vean y evitar que me nombren, que me conecten con algo o que me digan cosas que no son ciertas; estoy viviendo otra vida muy diferente”.
No obstante, en un informe publicado recientemente por El País, una fuente de inteligencia indicó que ‘Flaco Jerson´ era parte de la guerra que se viene librando en el centro y norte del Valle por el reacomodo de las organizaciones criminales tras el regreso de varios de los antiguos capos del Cartel del Norte del Valle que habían sido extraditados.
Aseguró la fuente que: “Hoy tenemos una disputa muy fuerte entre Pipe Montoya, sobrino de Diego Montoya, y el ‘Flaco Jerson’, en la que están involucrados otros excapos como ‘Palustre’ y ‘Chocolate’. Los Flacos, que tienen mucho que ver con el Flaco Jerson, es una ramificación de ‘Los Machos’ y junto a Nueva Generación están relacionados con organizaciones de Pereira y Medellín”.
Camacho negó tajantemente que eso sea cierto e indicó que “no sé quiénes son los Flacos, los he leído en los periódicos y me puede poner a los que quiera en frente. No sé absolutamente nada de ellos ni tengo absolutamente ningún vínculo, ninguna relación. Flacos en Colombia hay muchísimos y es uno de los apodos más normales que existen y no tengo ningún tipo de vínculos con ellos porque no los conozco”.
Sobre la versión del presunto enfrentamiento con un sobrino de Diego Montoya, asegura que le genera incertidumbre e inseguridad “porque de vedad no sé de donde sale esa versión que no es cierta. Yo con el señor Felipe no tengo absolutamente ningún problema, pero de todas maneras estoy incómodo y ya no sé ni dónde dormir”.
“El sobrino de Diego Montoya, en su pasado, fue jefe mío y con él hablé cuando llegué de Estados Unidos, no creo tener ningún tipo de problema con él. De mi parte solo los mejores deseos para él y para su familia. No sé de dónde sale esa historia y esa es la razón por la que quiero aclarar esto. Además porque si le llega a suceder algo en contra de él o en contra mía, cualquiera de los dos seríamos perjudicados; entonces yo no tengo por qué pagar o salir a responder por actuaciones de las que ni siquiera tengo idea”, insistió el Flaco Jerson.
“La única guerra que hoy quiero librar es con mi pasado y la guerra de recuperar a mi familia y poder convivir con ellos y salir adelante. Porque a nosotros no nos abren una cuenta ni el en el banco de sangre. No tenemos vida comercial y hay lugares en los que no nos dejan entrar y creo que tenemos derecho al perdón”.
Luis Gustavo Moreno, exzar anticorrupción y quien también fue extraditado a Estados Unidos es el abogado de alias Flaco Jerson y recalcó al respecto que: “Hay muchas personas que creemos en los nuevos comienzos, en las segundas oportunidades y es evidente que tenemos un pasado donde ya pagamos por ello, donde hicimos cosas que a la luz del derecho penal se consideran delito, pero eso no quiere decir que uno cargue con ese lastre toda la vida. Es fácil pensar que una persona que ya estuvo allá (extraditado a EE.UU.) o existió una pena siga andando por el mismo camino”.
Insiste Jerson Camacho en que desde que llegó de su extradición “vivo en otra ciudad, me dedico a otras situaciones diferentes, me busco la vida tranquilamente y esto que se publicó perjudica a mi familia; no tanto a mí como ser humano porque yo tengo que acarrear las consecuencias de lo que hice, pero mi familia no tiene porqué seguir viviendo en esa incertidumbre”.
Quiero aprovechar para pedir perdón
En la que es su primera entrevista a un medio de comunicación, ‘Flaco Jerson’ tuvo un espacio para la reflexión y hacer un balance de lo que fueron tantos años de violencia desde diferentes organizaciones del narcotráfico. “Quiero, primero que todo, pedir perdón a demasiada gente que le causé daño en el recorrer de mi vida pasada. No puedo ya resarcir eso pero sí me siento mejor pidiendo perdón por ese daño”.
Frente a lo que fue su vida criminal, indicó que “solo me dejó dolor y tristeza, mucho arrepentimiento y te digo que he visto caer demasiados amigos muertos, demasiados problemas, demasiada sangre, demasiadas lágrimas de personas queridas y de desconocidas. Con ningún dinero se paga eso, pero ya no puedo devolver el pasado y lo que me queda es seguir mi vida y pelear la guerra de salir adelante”.
“Muchas veces, señor periodista, uno tiene que hacer cosas que ni siquiera las quiere hacer; yo pertenecí a una organización, yo ya pagué por ello. Yo recibía órdenes y si usted no las cumple, pues suceden cosas, situaciones, generalmente uno no decide que hago esto o hago lo otro. Por eso quiero aprovechar este espacio y pedir perdón porque si hubiese sido mi actuar, lo hubiese hecho con justificación, pero se hacían cosas simplemente que ordenaban, eso es todo. Y me arrepiento de todo lo que hice, esa es la verdad”.
“El peor ejercicio que podemos escoger en la vida para ganarnos el dinero es delinquir. Lo digo yo que ya pagué, hice diez años por eso, me privé de mi familia, los hice sufrir, hice sufrir a muchísima gente más con mis acciones y yo hago un resumen hoy de mi vida que ya tengo 53 años y le digo que no vale la pena. Somos poquitos lo que estamos vivos a estas alturas del paseo y por eso quiero aclarar este tema”.
Como abogado de Jerson, agrega Luis Gustavo Moreno, “y como ser humano que también vivió la extradición, hoy abandero las segundas oportunidades, abandero los nuevos comienzos; pienso que en el país abunda la impunidad y los que hemos pagado, los que nos hemos resarcido, los que llevamos ese estigma de ser condenados y que no podemos abrir ni siquiera una cuenta de ahorros, por eso estoy con Jerson apostando a nuevos comienzos”.
“Quienes hemos pasado temporadas en las prisiones tenemos todavía mucho que aportarle a este país y a la sociedad; y los que no se han judicializado o no se han sometido a la ley, los que no han pagado por sus culpas, lo mejor es que lo hagan”, concluye el abogado Moreno.