Colombia
Increíble: Abuela de niños perdidos en Caquetá asegura que chamanes le entregaron un mensaje esclarecedor, ¿qué le dijeron?
Entregó detalles de la conversación que le da esperanza de encontrarlos con vida.
La abuela de los cuatro niños que están desaparecidos entre las montañas de Caquetá y Guaviare desde hace 24 días, reveló en una entrevista exclusiva con Semana que tuvo una conversación con chamanes, estos le entregaron detalles del supuesto estado de salud en el que se encontrarían los pequeños y la fecha en la que podrían ser hallados.
“Me dijo que los tienen rodeados los indígenas, que los niños están vivos y los van a encontrar”, manifestó María Fátima Valencia. Además en el espacio con Semana afirmó que de estas sospechas compartidas por los integrantes de su comunidad, tiene la esperanza intacta por las pruebas que han identificado las Fuerzas Militares en la selva.
De hecho, esta información se la entregaron este martes, 23 de mayo, a través de una llamada telefónica que salió del Amazonas. En medio de la angustia por no saber dónde están los nietos, le dijeron que guardara la calma porque en cuestión de horas los podría tener en sus brazos. Ella está apegada a esta versión.
La abuela narra que le dijeron que las personas que les siguen las huellas están a punto de verlos. Tal como lo piensan las autoridades, los chamanes dieron cuenta que la caminata la estaría liderando la niña de trece años. De igual manera, les estaría brindando los primeros auxilios a dos de ellos que tendrían lesiones.
En este punto se encontraron los restos de la aeronave y los cuerpos de los tres adultos que viajaban en ella. Los cuatro niños, según señalan rescatistas, habrían salido con vida del siniestro.
“Él los miró y me dijo que dos niños tienen heridas, pero la más grandecita los cuida, los limpia con cualquier cosita. Los niños están vivos, gracias a Dios. Ojalá vengan porque ya le metieron mucha gente ahí”, detalló la mujer que se trasladó desde la zona rural de Araracuara (Amazonas) hacia Villavicencio para recibir cualquier noticia.
Con base en el relato que le entregaron, la información podría llegar en poco tiempo: “Me estaba contando que, de pronto, hoy o mañana se encuentran. Ya los tienen rodeados”, señaló. Además de las dudas sobre la ubicación de los menores, tiene preocupación por el cadáver de su hija porque no se lo han entregado.
Ella perdió la vida cuando se movilizaba en una avioneta que cubría la ruta entre Amazonas y Guaviare, accidentada el primero de mayo y recuperada quince días después con otros dos adultos fallecidos. En esa aeronave también iban sus cuatro hijos que habrían sobrevivido y estarían caminando por la extensa selva.
“Estoy preocupada. No me han entregado el cuerpo de mi hija y no se han encontrado a esos niños. Ay, no. Ya son 24 días desde el primero de mayo. El [cadáver] lo están acomodando. Ellos me lo entregan en San José y yo lo llevo para Araracuara, y de Araracuara a mi comunidad”, agregó María Fátima Valencia.
En el exclusivo con Semana, la abuela concluyó que, desde que colapsó la aeronave, no ha recibido un mensaje del presidente Gustavo Petro, “ni un audio”, pero tiene comunicación directa con los funcionarios que están adelantando la búsqueda. Sin embargo, los datos de la desaparición los ha encontrado en los medios y las redes sociales.
Nuevas pistas encontradas
Las Fuerzas Militares y los indígenas hallaron nuevos elementos que, al parecer, fueron dejados por los niños de 13, 9, 4 años y 11 meses. Lo encontrado se suma al tetero, la huella y la balaca de cabello que fueron encontrados hace una semana en las labores de rescate que iniciaron hace 17 días cuando ingresó el primer grupo de Comandos de las Fuerzas Especiales.
El trabajo se ejecuta de manera conjunta con un grupo de indígenas Nukak en la Operación Esperanza. De acuerdo con las Fuerzas Militares lograron ubicar en dos lugares diferentes pañales, tenis, un accesorio de celular, una tapa de tetero y una toalla.
Destacan que la zona donde están los menores tiene características complejas por la humedad, no se ve más allá de los 20 metros de distancia y aseguran que los rayos del sol no alcanzan a pasar por entre los árboles.
“El primer hallazgo se realizó a una distancia de 560 metros al occidente del lugar del siniestro aéreo del Cessna 206. Allí una mujer Nukak, quien iba con otro grupo de indígenas y Comandos de las Fuerzas Especiales encontraron un par de tenis que por su talla pertenecerían al menor de cuatro años, un pañal usado pequeño y una toalla de color verde”, aseguran las Fuerzas Militares.
Según los análisis realizados a estos elementos, al parecer, fueron dejados en el lugar por los menores entre el 3 y 8 de mayo aproximadamente. Deducen además que existe la posibilidad de que los cuatro niños “hayan salido con vida del accidente y posiblemente no sufrieron heridas abiertas debido a que no se encontraron rastros de sangre”.
El reporte oficial confirma que el segundo rastro “fue localizado por un Comando de las Fuerzas Especiales quien iba con otros indígenas Nukak, hallando otro pañal, una tapa rosada de un tetero y un marco negro de un celular”.
Este segundo hallazgo fue ubicado a 428 metros de distancia al noroccidente del punto donde el monomotor HK2803 se siniestró y terminó con la vida de los tres adultos que viajaban en él, entre los que se encontraba la madre de los menores que son buscados.
“Las evidencias halladas hasta el momento confirman que los esfuerzos se están realizando sobre la zona correcta”, afirman las Fuerzas Militares.