Colombia
Estos son los puntos claves tras la compra y puesta en funcionamiento del Software Pegasus
El software solo habría sido instalado para la lucha antinarcóticos.
Luego de darse a conocer una investigación realizada por ‘El Tiempo’, en el que se revelaba que Estados Unidos fue quien financió la compra del software Pegasus para Colombia, para luchar contra el narcotráfico, varios puntos claves han sido puestos sobre la mesa acerca de cómo funcionó la operación.
Además, el uso de dicho software solo sería para luchar contra el narcotráfico. La compra de Pegasus se dio tras entregar 11 millones de dólares en Israel. El primer pago se realizó el 27 de junio de 2021, por 5,5 millones de dólares, y el segundo, por el mismo valor, se dio el 22 de septiembre del mismo año.
Según lo menciona la Unidad Investigativa, el pago que realizó el Gobierno de Joe Biden coincide con dos vuelos que se realizaron desde Israel hasta Bogotá. Estos llegaron hasta la base antinarcóticos y luego retornaron a Israel.
Esto sería clave, sobre todo porque desde hace semanas atrás el expresidente Duque habría insistido en un comunicado que “frente a las informaciones que han circulado en medios de comunicación durante los últimos meses sobre una supuesta adquisición del software “Pegasus” por parte del Estado Colombiano, se ha establecido que no existen registros de dicha compra.
Así lo han manifestado el Ministerio de Defensa y, más recientemente, la Dirección de Inteligencia de la Policía, confirmando que tampoco hay registros en el Sistema Electrónico de Contratación Pública, SECOP, ni en los gastos reservados”.
Otro dato revelado es que el software habría quedado fuera de servicio en la lucha antinarcóticos en Colombia en el año 2022. La operación realizada por el Gobierno Biden fue reservada, por lo cual solo se enteraron algunas personas en los organismos colombianos de seguridad.
Para su manejo, se realizaron también “protocolos estrictos con controles y equilibrios”, los cuales estuvieron bajo la supervisión de Estados Unidos. Las fuentes confirmaron que no hay evidencia que compruebe la utilización indebida del software, sobre todo para espiar a los políticos del país.