Aire acondicionado y ventilador: esta es la abismal diferencia en consumo de energía

En lugares con altas temperaturas, el uso de sistemas de climatización se vuelve indispensable en muchos hogares y oficinas.

Sin embargo, al momento de elegir entre un aire acondicionado o un ventilador, no solo se debe tener en cuenta el nivel de confort, sino también el impacto que ambos dispositivos tienen en el consumo de energía eléctrica.

Tanto el ventilador como el aire acondicionado cumplen la función de brindar una sensación térmica más agradable, pero lo hacen mediante mecanismos completamente distintos, lo que genera una diferencia significativa en términos de eficiencia energética y gasto mensual.

A continuación, se explican sus principales diferencias en consumo.

Funcionamiento y consumo del ventilador

El ventilador no enfría el aire, sino que lo mueve. Al generar una corriente de aire sobre la piel, favorece la evaporación del sudor, lo que produce una sensación de frescura. Este efecto es eficaz en ambientes no demasiado calurosos o cuando hay ventilación cruzada.

En cuanto al consumo, los ventiladores son considerablemente eficientes. Un ventilador de mesa o pedestal suele consumir entre 40 y 75 vatios por hora, mientras que uno de techo ronda los 60 a 100 vatios por hora.

En términos prácticos, si se utiliza un ventilador durante ocho horas diarias, el gasto mensual puede situarse por debajo de los 15 kilovatios-hora, dependiendo del modelo y el tiempo de uso.

Funcionamiento y consumo del aire acondicionado

El aire acondicionado, en cambio, utiliza un sistema de refrigeración con compresores, gases refrigerantes y ventiladores internos. Este proceso permite bajar efectivamente la temperatura del ambiente, a diferencia del ventilador, que solo mejora la percepción térmica sin enfriar el aire.

No obstante, esta capacidad tiene un costo energético mucho mayor. Un equipo de aire acondicionado tipo split de una tonelada de refrigeración (equivalente a 9.000 a 12.000 BTU) puede consumir entre 1.000 y 1.500 vatios por hora.

Si se utiliza durante ocho horas al día, el consumo mensual puede superar fácilmente los 250 kilovatios-hora. Modelos más grandes o antiguos pueden alcanzar consumos aún mayores.

Diferencia de consumo entre ambos

La diferencia entre ambos dispositivos es considerable. Un ventilador puede consumir hasta 20 veces menos energía que un aire acondicionado encendido durante el mismo tiempo. Mientras que el ventilador representa una opción accesible y de bajo impacto en la factura eléctrica, el aire acondicionado ofrece un nivel de confort superior, pero con un costo energético elevado.

Factores adicionales a considerar

Además de la diferencia en consumo, es importante tener en cuenta otros elementos al momento de elegir entre ambos dispositivos:

• Clima: En regiones con temperaturas extremas, el ventilador puede ser insuficiente para mantener condiciones confortables.
• Tamaño del espacio: En áreas grandes o mal aisladas, el aire acondicionado requerirá más esfuerzo energético para enfriar el ambiente.
• Eficiencia energética del equipo: Modelos modernos de aire acondicionado con tecnología inverter pueden reducir significativamente el consumo.
• Duración del uso diario: A mayor cantidad de horas de uso, mayor será la diferencia de consumo entre ambos sistemas.
• Costos de electricidad en la región: La tarifa por kilovatio-hora también influye directamente en el impacto económico.