Presidente de la Cámara salió en respaldo de Petro tras fuerte revelaciones de Álvaro Leyva; “seguro tiene dificultades”

Luego de la controversia generada por una carta del excanciller Álvaro Leyva, donde cuestiona fuertemente la gestión del presidente Petro, y habla de aspectos como “adicciones”, el presidente de la Cámara de Representante, Jaime Raúl Salamanca, salió en defensa del mandatario.

Por medio de un extenso mensaje en su cuneta de X, el congresista aseguró que, a su opinión, ve a Petro “muy trabajador, comprometido, lúcido y con gran amor por el país”.

Acto seguido, afirmó que no es seguidor de Petro, pero que desde su dignidad en la Cámara ha podido observar la gestión del gobierno actual.

“No soy petrista, pero si le puedo decir al país que gracias a mi presidencia en la Cámara he podido conocer al menos un poco más de cerca a un ser humano admirable. No comparto todo lo que dice o hace, pero la verdad es que es una persona de la cual tenemos mucho que aprender. Seguro tiene dificultades (como todos), pero es un hombre coherente y luchador”, fueron las palabras de respaldo.

Ya para cerrar sus palabras, Salamaca puntualizó que estos ataques son repetitivos, y se refirió a los señalamientos personales como una forma “miserable” de hacer política.

“Sería bueno que lo defendieran y no guardaran silencio a estos ataques que ya son recurrentes. Cierro con una opinión personal que tengo desde siempre: el peor ataque político y el más ruin es el que se hace a la vida privada de la gente. Es cobarde y miserable”, puntualizó en legislador.

Es importante destacar que la carta de Leyva es un texto muy personal en la que habla de la supuesta drogadicción del mandatario, de situaciones embarazosas que por su condición le habría hecho pasar Petro a Leyva cuando era canciller y del daño que, según él, le están haciendo el ministro del Interior, Armando Benedetti, y la actual canciller, Laura Sarabia, a su Gobierno.

Particularmente, Leyva habla de un bochornoso incidente que se dio en París cuando Petro desapareció por dos días y se desconocía su paradero.

“Fue una situación embarazosa para mí y más cuando supe en dónde había estado”, dice Leyva.

Sugiere que incluso la inteligencia francesa sabía qué pasó con el presidente, aunque no revela exactamente qué fue. Solo dice que esta situación tiene relación con la drogadicción que, según él, padece el presidente: “Fue en París en donde pude confirmar que usted tenía el problema de la drogadicción”.

Con información de Colprensa.