Juliana Guerrero, nueva viceministra de Juventudes, rompe el silencio por sus vuelos y título universitario

El reciente nombramiento de Juliana Andrea Guerrero como nueva viceministra de Juventudes en el Ministerio de la Igualdad ha estado rodeado de polémica. Su ascenso despertó cuestionamientos tanto por su preparación académica como por los viajes que hizo en aeronaves de la Policía Nacional.

En entrevista con Néstor Morales, en Mañanas Blu, este 2 de septiembre, la designada funcionaria encaró las múltiples críticas que le han hecho.

Al ser consultada sobre los traslados en aeronaves de la Fuerza Pública, aseguró que no fue una decisión personal, sino que acató instrucciones oficiales.

“Fue una misión relacionada con seguridad nacional”, afirmó, y agregó que “no hay ningún misterio” en los convenios entre la Policía Nacional y los ministerios para diferentes desplazamientos.

En su momento trascendió que dichos viajes tendrían un interés político: aparentemente, afianzar favores para la toma de decisiones en el Consejo Superior de la Universidad Popular del Cesar.

“Lo que yo fui a hacer no tuvo nada que ver con la universidad. Fue una actividad delegada por el ministro (Armando Benedetti), vinculada a temas de orden público y paz total”, sostuvo Guerrero, en respuesta a esos cuestionamientos.

Cabe recordar que la hoja de vida que se hizo pública en días pasados exponía que Guerrero llegó a ser viceministra sin un título universitario y con un técnico en contabilización de operaciones comerciales en el Sena.

Al respecto, señaló que su grado como contadora pública fue el pasado 19 de julio, pero, según ella, el documento que se publicó estaba desactualizado. “Fue un error humano en medio del proceso”, dijo.

Y defendió que, con 23 años, cuenta con la experiencia para ejercer el cargo. “Llevo más de ocho años en procesos de liderazgo juvenil, en festivales, en discusiones de ley y acompañando el Subsistema Nacional de Juventudes”, agregó en conversación con el mencionado medio.

Guerrero tuvo su primera aparición en la esfera pública durante un consejo de ministros, cuando el presidente Gustavo Petro se refirió a ella como una joven “valiente y rebelde”.

Sin embargo, su nombre quedó en el ojo del huracán tras el escándalo por el uso de aeronaves oficiales para misiones particulares en el departamento del Cesar.

Según reveló Cambio, la ahora Viceministra no solo utilizó un avión de la Policía Nacional para un viaje a Valledupar, sino que también se desplazó en helicóptero hasta Aguachica, Cesar, en compañía de su hermana, Verónica.

Desde el Ejecutivo defendieron que estos desplazamientos, al sostener sin pruebas que se trató de misiones para la paz.