Germán Bahamón, gerente de Fedecafé, habla del buen momento del sector: “La cosecha cafetera llegará a $12,8 billones este año”

Para los cafeteros colombianos el 2024 ha sido el año del café. Según el último reporte de Dane, el sector ha tenido un crecimiento de más del 30%.

Cifra que sigue en aumento gracias a la productividad de las 842.000 hectáreas que se encuentran cosechadas en el país. De hecho los cultivadores esperan terminar el año de cosecha con más de 13 millones de sacos.

Germán Bahamón Jaramillo, gerente de la Federación Nacional de Cafeteros, en entrevista con El País habla de a qué se debe este momento de gloria que vive el sector, cómo sacarle provecho, qué representa para la economía colombiana, el precio máximo que no se tocaba desde hace más de 40 años y las perspectivas para el 2025.

El 2024 ha sido el año del café y actualmente es un jalonador de la economía del país. ¿A qué se debe este buen momento?

El café vuelve a ser protagonista de la economía nacional. El Dane nos mostró un crecimiento del Producto Interno Bruto colombiano por el 2%. Una cifra que nos indica que la economía está reactivándose y cuando uno entra en el detalle de ese 2%, encuentra que el renglón que más aporta es agricultura, ganadería y pesca que crece un 10,7%.

Pero cuando entra un poco más se da cuenta que el protagonista de la economía colombiana es el café creciendo un 33,6%. Eso nos complace enormemente porque nos habíamos comprometido a poner nuestro grano de arena para la reactivación económica del país y lo estamos haciendo.

Hoy le volvemos a recordar al país que Colombia es café y que el café sigue aportando al desarrollo económico de las regiones y al tejido social. ¿Cómo se da esto? Esto se da porque la producción ha venido creciendo de una manera sostenida.

Desde septiembre del año pasado, hemos visto que hay una recuperación en la productividad de nuestro campo, gracias al acompañamiento del servicio de extensión, a los planes de fertilización, a los programas de ICR cafetero, de Faía que se subsidió la fertilización, que nos ha permitido que en este 2024, no solo crezcamos la producción, sino que al mismo tiempo renovemos más de 90.000 hectáreas de café. Cifra que no veíamos desde hace 13 años. Entonces, eso quiere decir que el gremio muestra su fortaleza, en el trabajo que hacemos en el campo y que los cafeteros están dándole la mano a ese crecimiento económico de Colombia.

Es decir, que se va a cumplir la meta de renovación de 100.000 hectáreas en el país...

Mire, lo importante es lo siguiente: en el 2022 renovamos 63.000 hectáreas. En el 2023 renovamos 77.000. Yo le puse una meta ambiciosa y retadora a la gerencia técnica de buscar las 100.000 y ya vamos por encima de 90.000. No sé si alcanzamos a llegar las 100.000, pero ya con lo que tenemos actualmente, superamos los 13 años anteriores y superamos el 10% de la renovación. Así que tenemos la posibilidad de decirle al país cafetero que hay sostenibilidad en el futuro, porque cuando uno renueva el cafetal es para tenerlo joven y tenerlo productivo.

¿Cuánto costará la cosecha cafetera este año?

Con la cosecha vamos a romper los 13 millones de sacos. Al final de octubre íbamos en 12,9 millones de sacos. Lo que yo considero es que vamos a estar alrededor de 13,2 millones de sacos al final de este año calendario y que eso además está irrigando la economía. El café, es el renglón económico más democrático de Colombia porque esa cosecha cafetera de $12,8 billones irriga las veredas de 600 municipios.

¿Este buen momento sirvió para recuperar la mano de obra que se ha ido perdiendo?

Yo creo que para nadie es un secreto que uno de los retos que tiene el sector agropecuario no solo en Colombia, es la mano de obra rural. Mucha de la población nuestra ha venido migrando a los centros poblados y se ha perdido esa posibilidad de tener mano de obra en las regiones rurales.

Lo que hemos visto en este momento es que con el nivel de precios que tiene el café, acompañado de una buena producción en nuestros campos cafeteros, si bien es cierto hemos venido sufriendo para la consecución de mano de obra, podemos decirle al país que se ha venido recogiendo el café y hoy tenemos una producción que crece por encima del 19%.

¿Qué está haciendo la Federación para motivar a los jóvenes a que no salgan del campo y se queden trabajando?

Lo que nosotros estamos haciendo muy posiblemente no tiene un efecto inmediato, pero si es la construcción de un camino profesional dentro de la industria del café, que pueda devolverle el arraigo y el orgullo al joven, para volver a la caficultura y para entender que dentro de la industria cafetera hay un camino profesional de éxito. Que puede ser recolector o agrónomo, pero también puede ser barista, catador y por qué no, puede hasta exportar.

¿Cómo aprovechar al máximo esta buena racha?

Lo que estamos buscando es productividad. No hay nada más importante para el cafetero que lograr productividad, porque la productividad genera rentabilidad. Sino no hacemos nada solo creciendo el número de hectáreas, por ejemplo.

Lo que necesitamos es hacer que las hectáreas que tenemos ahora, que son 842.000, sean cada vez más productivas y eso lo hemos venido haciendo este año. Muestra de eso es que podemos renovar 90.000 hectáreas, pero al mismo tiempo crecer en la producción. Y eso se debe única y exclusivamente a que hemos fertilizado los campos y hemos hecho prácticas agronómicas que permiten que la productividad por área crezca. Yo creo que eso es lo importante.

El parque cafetero está ahí, está sano, está saludable y tiene la necesidad de que hagamos todos los esfuerzos con el Gobierno Nacional, con el Ministerio de Agricultura para seguirle llevando herramientas como el ICR, como el Faía o como cualquier tipo de estos subsidios que acompañen el desarrollo agrícola en términos de productividad.

Ahora que habla de trabajo conjunto con el Gobierno, ¿cómo están las relaciones?

Han sido unas relaciones armónicas y prueba de ello es que este año hemos venido mostrando resultados en torno a el crecimiento agrícola y que, además, ese crecimiento agrícola de la productividad de nuestro campo cafetero está acompañando la reactivación económica. Los gremios nos habíamos comprometido con el Gobierno Nacional a hacer todos los esfuerzos posibles para darle una reactivación a nuestra economía y el café es sin lugar a dudas el protagonista número uno de la economía colombiana.

El precio del café está tocando máximos que hace años no alcanzaba. ¿Qué tanto pueden durar? Se dice que es por la situación que vive Brasil

El precio que estamos viendo en la cotización de la bolsa de Nueva York no sería importante si no tuviéramos la posibilidad de tener una buena producción. En este momento tenemos un crecimiento del 19% en producción y el precio en la cotización de la bolsa nos ha acompañado porque ha crecido más del 70% en el último año. Algo que no veíamos hace 47 años está ocurriendo. Entonces, es bien importante que entendamos que en este momento la caficultura está generando progreso, está generando riqueza a nuestros cafeteros y eso es algo bien importante, entendiendo que el café es un cultivo de sitio largo.

Yo no lo veo que sea por la situación de Brasil. El consumo de café en el mundo ha venido creciendo, no a pasos agigantados, pero sí a pasos estables. El consumo del café en el mundo ha crecido en los últimos años a una rata de 2% anual y eso está consumiéndose inventarios que había en orígenes y en destino. Entonces, los inventarios están en una en una mínima expresión y en Brasil han tenido algunos inconvenientes enfrentando el cambio climático y eso ha bajado su productividad. Entonces, eso genera inmediatamente que haya una reacción del precio.

¿La falta de contenedores qué tanto puede impactar las exportaciones de café?

Este es un tema preocupante, no solo para el café. En Colombia también se exporta banano, bienes industriales y todos estamos sufriendo en este momento por la crisis de contenedores. Obviamente estamos esperando que todos estos organismos, estos gremios acompañen en la resolución de esos inconvenientes y que el país entienda que en la balanza comercial y en la seguridad de las exportaciones está también la sostenibilidad de este país.

¿Cuál es el reto que tiene la caficultura actualmente?

Lo importante es entender que como lo hemos venido haciendo con resultados, el café tiene más futuro que pasado. Y eso es lo que nos ha invitado a trabajar en los pilares de austeridad, eficiencia e innovación.

Cuando los cafeteros me invitaron a trabajar para ellos, yo les dije que queríamos traer prácticas corporativas, para hacer de esta empresa, la gran empresa de los cafeteros, una empresa austera, eficiente y con innovación que nos permita ser más productivos y más competitivos. Y eso es lo que estamos haciendo. Estamos adportas de un Congreso Cafetero en donde le mostraré dándole cuentas a los cafeteros, los resultados de cada una de las empresas.

¿Qué temas se tocarán en el Congreso Cafetero?

Lo que hacemos es una revisión de toda la cadena de valor desde el cultivo hasta la exportación, para sacar las recomendaciones para el próximo año. Presentaremos los resultados y revisaremos qué tenemos que seguir modificando en busca de la sostenibilidad gremial.

Perspectivas para el 2025...

El 2025 va a ser un año interesante para la caficultura. Creemos que el valor de la caficultura se mantendrá, el volumen puede crecer a unos 13,5 millones de sacos, es lo que estamos esperando y seguiremos haciendo esfuerzos para seguir por encima del 10% de la renovación de nuestro cafetal.