Colombia
El drama que viven las familias caleñas por falta de medicamentos en las farmacias de las EPS
Según datos de Invima, 25 fármacos están desabastecidos entre el 2023 y marzo del 2024. Aumento de la demanda y descontinuación del producto, algunas de las causas. Pacientes, los más afectados en la continuidad de sus tratamientos.
El desabastecimiento y escasez de medicamentos que se registra en el país, desde mediados del 2022, tiene a los pacientes viviendo un verdadero viacrucis para reclamar su medicina en los dispensarios, lo que no solo pone en riesgo su salud, también sus vidas.
John Edward, quien tiene a su esposa afiliada a Emssanar, en el régimen subsidiado, señala que ella es una paciente renal, a quien deben hacerle diálisis tres veces a la semana. Desde el mes pasado viene acudiendo al dispensario de la entidad, donde le dicen que no hay y le ponen un sello de pendiente.
“Esta vez tampoco lo hubo”, dice mientras enseña los sellos. Y agrega: “Toca pelear con la entidad para que le den lo que uno necesita. A estos pacientes deben darles prioridad, un día que mi esposa falta a diálisis, es un día que pone en riesgo su vida. No tenemos cómo comprar el medicamento, es muy costoso”.
Se trata del Cinacalcet, utilizado en el manejo y tratamiento del hiperparatiroidismo secundario (en población en diálisis). Una caja de 30 tabletas puede costar 1.200.000 pesos en el mercado.
Lo extraño es que este producto no aparece en la lista de desabastecidos, ni en riesgo de desabastecimiento de Invima.
Otro caso es el de doña Aura Marina Albán, de 58 años. Su hija, Zulderi, de 38 años, tiene síndrome de lennox-gastaut, una encefalopatía epiléptica del desarrollo poco frecuente, grave y de inicio temprano, caracterizada entre otras cosas, por múltiples tipos de crisis epilépticas. Desde noviembre del año pasado viene reclamando el cannabidiol o CBD, un medicamento que tiene acción antiepiléptica o anticonvulsivante, pero nada. Este año ya registra cinco sellos de pendiente en la orden de medicamentos. “Me dicen que no hay, no dan la fecha de entrega y mi hija convulsiona a diario. Una crisis le puede durar una hora y le dan varias en el día. Me da mucha angustia, es una lucha muy dura sin la droga”, dice doña Aura Marina, quien la última vez estuvo cuatro horas quemándose al sol, con hambre y sed, pero todo fue en vano. Ya tiene el caso ante juzgado pero el proceso es lento.
Esta es la radiografía de miles de pacientes en la Cali y el país, que a diario se enfrentan a esta misma problemática: “No hay”, “Está desabastecido”, “No se sabe cuándo llega”.
“Estos son los que sufren día a día, con enfermedades que no dan espera a que se les entregue en un mes, o dos y hasta tres meses. A veces se vence la orden y tienen que volver donde el médico para que se los ordene nuevamente. Esto viene pasando desde hace unos dos años”, indicó el veedor quien a diario recibe unas 30 quejas por este problema.
Reitera que “venimos pidiéndole al Ministerio de Salud que haga unas mesas de trabajo con las EPS y los laboratorios para encontrar una solución, pues además de agravar la enfermedad, este tema también ha causado la muerte de personas”.
Calderón planteó como una de las posibles causas, el que los laboratorios no están produciendo estas medicinas institucionales porque es mucho más rentable venderlas al canal comercial. Otros medicamentos que presentan escasez o están desabastecidos son los retrovirales para el tratamiento del VIH; diabetes, hipertensión arterial, enfermedades huérfanas y psiquiátricos.
Un fármaco esencial para los colombianos es el acetaminofén. Según Acemi, cerca de 50 millones se toman cada mes, pero desde octubre del año pasado viene siendo monitoreado por Invima por insuficiencia de oferentes y aumento de la demanda.
Las causas
Algunas de las causas que señala Invima son: aumento de la demanda, descontinuación del producto, problemas de manufactura, (no tener certificación de BPM vigente), problemas de adquisición de la materia prima e insuficiencia de oferentes.
Sin embargo, algunos profesionales apuntan a otras razones.
El profesor Enrique Peñalosa, del Instituto de Salud Pública de la Universidad Javeriana, aseguró que se trata de un tema de flujo de recursos. “Uno de los inconvenientes que se está teniendo es que hay un gasto muy alto en términos de los servicios de salud, y esto hace que las EPS no tengan los recursos suficientes. De ahí que se retrasen los pagos a los proveedores de medicamentos, lo que llaman gestores de medicamentos, y por tanto, ha disminuido el flujo de medicamentos a estas instituciones”.
Otro factor son las demoras que tiene Invima en el tema de nuevos registros, revisiones o actualizaciones de otros medicamentos. Lo anterior se suma a la incertidumbre que genera para el sistema la reforma a la salud.
Por su parte, Claudia Vaca, profesora del Departamento de Farmacia de la Universidad Nacional de Colombia, recordó que el Invima hace un monitoreo permanente y establece una alerta sobre la escasez o desabastecimiento de medicamentos.
Para este mes son 250 los medicamentos monitoreados entre el 2023 y el 2024, de los cuales 25 están desabastecidos y 12 más están en riesgo de desabastecimiento.
La epidemióloga dijo también que no es lo mismo que se tenga alerta de desabastecimiento de un medicamento antirretroviral de pediatría para niños con VIH o a uno como los anticonceptivos de los cuales se tiene sustituto.
“Yo miraría de la lista de desabastecidos, la importancia en poblaciones prioritarias: niños y mujeres y en cierto tipo de patologías como cáncer o manejo de urgencias, pues pueden poner en riesgo la vida de las personas”, precisó.
No obstante reconoció que una de las causas puede ser la falta de materias primas a nivel internacional y a que no hay suficientes oferentes, debido a que es un mercado monopólico u oligopólico.
El exsecretario de Salud, Luis Alberto Tafur, aunque reconoció que no conoce el trasfondo anotó algunas razones. “Hay varias situaciones que podríamos conjeturar como son la falta de autorización por el Invima para la importación y /o licencia para la venta en el país. Compra de pocas cantidades por las EPS o por los distribuidores de medicamentos ante la incertidumbre originada por la reforma al sistema, incremento de valor y precio de venta en el país no autorizado”.
Adicional a esto, actualmente el Invima tiene más de 15.000 trámites por resolver, entre ellos, registros nuevos y renovaciones de licencias de medicamentos.