Petro contradijo a Sarabia y afirmó que “no seguirá Thomas Greg” elaborando pasaportes; lanzó pullas a Álvaro Leyva

Durante el Consejo de Ministros transmitido este martes, 24 de junio, por los canales públicos, el presidente Petro volvió a la polémica del contrato con la empresa Thomas Greg & Sons para realizar los pasaportes, afirmando que “No va a seguir Thomas & Greg porque la licitación que estaban haciendo en Cancillería era fraudulenta”.

El mandatario aludió al caso de un agente de inteligencia español, sobre el que solicitó investigar a la Dirección Nacional de Inteligencia (DNI), porque “resulta que maneja dineros de varias agencias y no es fiable, incluida la información que había sobre Assange en la embajada de Londres, porque él puso las cámaras”, sin embargo, no aclaró cuál es la relación de esto con la empresa Thomas Greg & Sons.

Al mismo tiempo, Petro lanzó varias pullas contra el excanciller Álvaro Leyva. “Por no hacerme caso terminó en un lío, que lo llevó fuera de la cancillería por la Procuraduría”, dijo el presidente sobre Leyva.

“Ahora quiere vengarse de mí con sus famosas cartas tontas, porque yo no hago vida social ni privada con el señor Leyva”, añadió Petro.

Al parecer, dirigiéndose a la canciller Laura Sarabia, el presidente indicó que “tienen que proceder bajo la ley, porque el presidente no da órdenes para incumplir la ley, a no ser que sea muy ignorante en el tema y me equivoque, entonces lo corregimos. Eso quería decirle, porque en este gobierno eso no se permite”, y luego concluyó ese tema con el imperativo, “se reúnen conmigo”.

La afirmación del presidente colombiano vendría complicar aún más las relaciones con la empresa de origen británico, puesto que en la tarde del mismo martes, la Cancillería de Colombia había confirmado que Thomas Greg & Sons seguiría encargada de los pasaportes por 11 meses más de lo estipulado.

La firma, al parecer, accedió nuevamente porque se presentó una nueva situación de urgencia manifiesta en la Cancillería, puesto que no han encontrado cómo reemplazarla y asumir la carga de los pasaportes sin traumatismos.

La cifra del nuevo contrato estaría entre los 400.000 y 450.000 millones, una cifra parecida al contrato que firmaron en la urgencia manifiesta pasada, cuando la Cancillería estaba a cargo de Luis Gilberto Murillo.

Aunque el presidente Petro ha manifestado en varias ocasiones que no desea continuar con esta empresa, los compromisos contractuales han mantenido al Gobierno dependiente de ella, de modo que si el nuevo contrato se realiza, solo hasta el 2026 podrían prescindir de sus servicios.

Y si el Gobierno se niega, habiendo un contrato ya firmado, podría ser demandado por millonarias sumas, además de crear una crisis de pasaportes.