Cecilia rajó a Petro y compañía

La estudiosa y disidente opinadora en agricultura Cecilia López fue ministra de este gobierno, la despidieron con Ocampo y Gaviria. Entrevistada por Semana, rajó de este gobierno y dio razones: son inexpertos, van por su lado, ignoran tareas en ministerios claves, desconocen la ley y los laberintos burocráticos. Cecilia es pesimista con este gobierno, aquí manda demasiado Laura Sarabia, buena gente, pero inexperta. Punto.

Un autogol se hizo el Ministro de la Salud lanzándole ladrillazos a las EPS y al cuerpo médico que lo critica. Decir que la pandemia fue mal gerenciada y que 30 millones de colombianos fuimos víctimas de “un negocio” es un novelón poco serio. El cuerpo médico fue generoso hasta jugarse la vida en la pandemia. Arrepiéntase, ministro. Punto.

Y subió Milei al trono, pinta no ladrón, no serruchero, no ventajista ni pillo. Milei a frenar el sindicalismo mañoso, parasitario, saboteador de empresas y conflictivo. Milei la tiene difícil, la Argentina de Gardel, Maradona y Messi tiene rota su economía. Punto.

Bogotá y Cali estrenan alcalde en 17 días, y veo que les están embolantando la entrega de información a Galán y Eder. Los paga-impuestos exigen saber qué alcaldías reciben, “las cosas claras y el chocolate espeso”. Claudia López, la alcaldesa fogosa, le está clavando un ‘corredor verde’ nefasto a Galán, lo está ninguneando. ¿Es exigente Alejandro Eder recibiendo el poder caleño? Lo veremos. Punto.

No se darán aguinaldos Andrés Pastrana y Petro, se tienen demandas. Desde el Centro Democrático uribista censuran al presidente Petro por la salud, el orden público, los secuestros y por traer como ‘jefe pacifista’ al extraditado Mancuso. ¿Será que lo traen para hacerle otro montaje al expresidente Uribe? Eso sostiene Ángela, mi amiga jurídica.

La Navidad es cruel con los niños pobres, les restriegan juguetes, tortas, uvas y turrones que jamás consumirán. Se desmayan ante la vitrina que los muestra. En navidades aparece el nuevo riquismo farolón y fantoche, ese de mala educación. Los ancianatos como el Cottolengo en Cali están en la quiebra. El pudiente que no hace caridades en Navidad está separando cupo en el infierno. Escojan. Punto.

Pasado mañana habrá gran borrachera nacional en las oficinas oficiales. Ojalá no haya peleas, ojalá no le peguen al jefe de personal, ojalá suspendieran esos derroches alcohólicos que pagan ustedes los paga-impuestos.

Pilas están adjudicando contratos millonarios a última hora, antes del año viejo y zumba el ‘ají’ y el ‘ceveyé’. Defienda sus impuestos. ¿Cuántos millones deja ese alcalde en caja? ¡Ufff!, se evaporan.