Impresionante: así habría sido el iceberg con el que habría chocado el Titanic

En abril de 1912, el Titanic, un barco que se consideraba “insumergible” y “inaudible”, colisionó en las frías aguas del Atlántico Norte, sellando su destino.

Una fotografía del iceberg, se cree que fue la causa del hundimiento, ha reavivado el interés en este suceso histórico. Esta imagen es potencialmente un fragmento de los recuerdos del trágico naufragio del transatlántico británico.

Existen varios relatos sobre el iceberg contra el que el Titanic se habría estrellado. Sin embargo, una subasta realizada por Henry Aldridge & Son Ltd presentó una foto que concuerda con los dibujos y descripciones proporcionados por los testigos del iceberg que golpeó al Titanic.

Esta fotografía, supuestamente capturada por el marinero Capitán W. Wood, quien sirvió en el SS Etonian, muestra un enorme bloque de hielo. Wood era aficionado a la fotografía y, según se menciona en la página de subastas, habría tomado la instantánea con su cámara.

Lo que otorga credibilidad a esta imagen es que va acompañada de coordenadas geográficas y la fecha exacta de la captura: 41°50 N 49°50 O, el 12 de abril a las 16:00 horas. Estas coordenadas coinciden con la ubicación y la fecha cercana del impacto del Titanic. Cuando llegó a Nueva York, el Capitán compartió la foto y envió una copia a su bisabuelo, junto con una carta donde mencionaba: “Te envío una fotografía del mar, el Etonian corriendo ante un vendaval y el iceberg que hundió el Titanic”.

Esta carta podría considerarse una evidencia sólida sobre la causa de la tragedia de 1912, ya que también agregaba que él y su tripulación habían pasado cerca de esos bloques de hielo 40 horas antes y en plena luz del día.

Dado el momento en que se tomó la foto, habría sido más sencillo capturar el iceberg en la imagen, a diferencia de los pasajeros del Titanic que se encontraban en medio de la noche y con limitada visibilidad.

Según informa el medio RT, esta foto se vendió por aproximadamente 45.000 dólares, aunque inicialmente se había ofrecido en subasta por 15.000 dólares.

Los restos del Titanic, una ventana al pasado

Dentro de los objetos que han sido recuperados y documentados en las expediciones al naufragio del Titanic, los zapatos se destacan como una presencia que es a la vez impactante y conmovedora. En el lecho marino yacen miles de zapatos, en su mayoría confeccionados en cuero, dispersos por la zona del hundimiento.

Durante mucho tiempo, tanto para los entusiastas de la historia del naufragio más famoso de la historia como para los expertos, se sostenía la hipótesis de que este impresionante cementerio de calzado era todo lo que quedaba después de la descomposición y disolución de los cuerpos humanos. Con el paso del tiempo, los cuerpos se descompusieron y fueron consumidos debido a las bajas temperaturas, la alta presión y la acción de organismos marinos y bacterias, mientras que los zapatos, fabricados con materiales más resistentes, se mantuvieron en gran medida intactos.

No obstante, expediciones posteriores y un análisis más minucioso y científico del naufragio del Titanic, junto con las corrientes marinas y todo lo relacionado con ese trágico accidente, han revelado una verdad menos desgarradora.

La gran cantidad de zapatos, que se encuentran en posiciones poco usuales y que no coinciden con la caída de un cuerpo a unos 4.000 metros bajo el agua, sugiere que estos zapatos formaban parte del equipaje que se hundió junto con los restos del barco.

Los zapatos no están solos; están rodeados por diversos objetos personales, elementos metálicos, botones y joyas que respaldan la conclusión definitiva de los expertos. No todos los pasajeros podían permitirse maletas de cuero; la mayoría llevaba bolsas hechas de algodón y lana, que se descompusieron hace décadas, revelando su contenido.

No obstante, el valor significativo de los zapatos que yacen junto al Titanic no debe subestimarse, ya que siguen siendo una fuente valiosa de estudio debido a que reflejan las diferencias de clase y género presentes en el barco. Se pueden encontrar zapatos elegantes y costosos propios de la primera clase, así como zapatos más modestos y simples asociados con la tercera clase; también hay zapatos masculinos y femeninos, que presentan diversos estilos, detalles y tamaños.