Exsenador Carlos Emiro Barriga fue condenado a diez años de cárcel por nexos con paramilitares

La Sala Especial de Primera Instancia de la Corte Suprema de Justicia, condenó en primera instancia al exsenador Carlos Emiro Barriga, a diez años de prisión por tener vínculos con paramilitares en el departamento de Norte de Santander.

Está sentencia se basa en que el funcionario realizó una alianza con el Bloque Catatumbo de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC), una organización paramilitar que operaba en dicha región.

De esa forma, la magistrada Blanca Barreto resolvió en su fallo que “condenar a Carlos Barriga de condiciones personales y civiles consignadas en esta providencia, como autor del delito de concierto para delinquir agravado, por las razones expresadas en la parte motiva de esta decisión”.

Asimismo, la Corte Suprema calificó como “indiscutible” la gravedad de la conducta que tuvo para ese entonces el senador Carlos Barriga, debido a que ‘traicionó’ la confianza de sus votantes y la representación de las diferentes personas del Norte de Santander.

Por otro lado, el fallo también mencionó que el exfuncionario tuvo interferencia “en el proceso democrático de elección popular a través de la concurrencia ilegítima de un grupo paramilitar, con lo que antepuso sus intereses personales y los de la organización delincuencial a los fines del Estado Social y Democrático de Derecho y la función pública que le correspondía desempeñar con probidad”.

Además, el comportamiento de Carlos Barriga fue calificado como una “burla” a los mecanismos de participación democrática, teniendo en cuenta que los habitantes de ese departamento, no pudieron libremente escoger el proyecto político.

“No puede perderse de vista que, conforme a la prueba obrante, los habitantes del sector de influencia del Frente Fronteras recibieron instrucciones directas acerca de por quién votar, bajo la intimidación propia que conlleva recibir tal orden proveniente de miembros del grupo paramilitar”, afirma la sentencia contra el excongresista.

De igual forma, el tribunal también mencionó que Carlos Barriga, siendo senador, “se puso al servicio de una organización paramilitar”, brindando un apoyo con La Isla, un predio de su propiedad que sirvió para entrenamiento para los paramilitares, con resguardo y almacenaje de armamento de alto calibre.

Esta situación, para la Corte Suprema, “lesionó gravemente la seguridad pública, pues no puede olvidarse que en el escalonamiento de la afectación del bien jurídico, la conducta ejecutada por el acusado genera el mayor reproche al consolidar un daño efectivo a los bienes jurídicamente tutelados”.

La Corte determinó que Carlos Barriga tuvo un actuar con “dolo”, explicando que no puede entender cómo un ciudadano que conoce del conflicto en el departamento haya tenido vínculos con paramilitares. Aparte de la condena en primera instancia, también se le instauró una multa de casi 4.000 salarios mínimos.