El taxista caleño Alexander Gil Chimunja, la nueva víctima mortal de la violencia de las pandillas de Puerto Tejada y Guachené

La muerte del taxista Alexander Gil Chimunja en medio de un hecho delictivo registrado entre los municipios de Puerto Tejada y Guachené muestra la intensidad de la violencia que ejercen los grupos armados al margen de la ley y las pandillas en esta parte del norte del Cauca.

“En nuestros municipios estamos acorralados por esa cantidad de jóvenes que integran las pandillas, las cuales son más de 25 en Villa Rica, Guachené y Puerto Tejada, son las mismas que salen asaltar en las vías que comunica a esta población así como con el departamento del Valle, no les importa la hora o el día al momento de atacar a los conductores para despojarlos de todo, como el caso del taxista, quien lo mataron por robarle las pertenencias y su vehículo”, denunció María Carabalí, líderesa social de esta parte del norte del departamento.

De hecho, y tras confirmarse este caso, volvió a trascender la denuncia que los pobladores de la zona adelantan desde hace ya un año sobre la desbordada violencia que ejerce el grupo delincuencial conocido como 5 y 6, cuyos integrantes son los responsables de la gran mayoría de hurtos a conductores que se moviliza entre los departamentos de Valle y Cauca. También hay otro de esta clase de grupos delincuenciales.

“Le cuento que el tema de Guachené es una bomba social, mucha violencia por parte de estas pandillas y que están muy bien armadas, entre ellas la 5 y 6, integrada por una cantidad de muchachos de esta vereda que llegan incluso a impedir el ingreso de la fuerza pública a la zona cuando cometen un acto delictivo y se esconden en esta población, como sucedió en el caso del taxista, donde la Policía y el Ejército no pudo ingresar al lugar para recuperar su vehículo luego de asesinarlo”, reconocen los mismos integrantes de la Policía.

Incluso, y como las mismas autoridades lo admiten, esta pandilla sostiene una confrontación territorial con otros grupos de jóvenes como son Los Bancos y Los del Guabal y otras de municipios como Puerto Tejada, donde están por ejemplo Los Letales, Los Rebeldes, Los Juan Bolo, Los Escaperos o Guatys, entre otras.

“Nosotros como fuerza de seguridad los consideramos como grupos delincuenciales, pero la alcaldía de Guachené, por ejemplo, maneja esos grupos de jóvenes como pandillas para poder gestionar recursos y buscar resocializarlos y hacer la paz entre ellos, no somos pesimistas, más bien realistas porque por el momento no va a existir paz en muchos años porque ya son muchos los muertos y las venganzas pendientes y estos muchachos se van a seguir matando. Una muestra de su capacidad armada de esta pandilla 5 y 6 se dio en el velorio de alias Gomelo, el cabecilla que murió en un operativo del Ejército y donde se buscaba capturarlo”, confiesan los uniformados que laboran en esta parte del norte del Cauca.

Es tan intensa la violencia de este grupo delincuencial, que incluso el exalcalde de esta población, Elmer Abonía Rodríguez, fue asesinado a tan solo nueve días de dejar su cargo cuando quedó en medio de un ataque delictivo registrado en la vereda Cabito de este municipio. Los responsables de este caso, de acuerdo con fuentes de la Policía, son integrantes de esta pandilla.

“Quieren dimensionar el poder de este grupo de delincuencia común, pues mire el vídeo de cómo fue el sepelio de alias Gomelo en septiembre de 2023, quien fue despedido en medio de disparos al aire por parte de sus amigos y cómplices, incluso cobró fuerza la versión de que los mismos que ejecutaron el asalto al taxista después fueron en el mismo taxi al barrio Jorge Eliércer Gaitán de Puerto Tejada a asesinar a un campesino de 50 años de edad y donde resultó herido el hermano del actual mandatario, entonces ustedes hagan una idea del tamaño de esta problemática”, agregaron los policías consultados.

Por eso, y como muestra del control territorial que ejerce la banda 5 y 6, la fuerza pública no pudo ingresar a la zona a la hora de recuperar el vehículo hurtado al taxista, de ahí que una empresa de seguridad privada se vio en la necesidad de ingresar por sus propios medios a la zona para ubicar este automotor para regresárselo a los familiares.

“La empresa Self Security le tocó ingresar solos a recuperar el taxi abandonado para que la familia del compañero vilmente asesinado no lo fuera a perder todo, ya que hace poco el compañero Alexander Gil se lo había empezado a pagar a otro señor, ahora tocara ver como será el contrato de compra venta que tenían como personas naturales, ya que las deudas con financieras o con los concesionarios es diferente”, denunció Johnny Rangel, director de La Mancha Amarilla de la ciudad de Cali.

Pero hay más. Como la zona también es controlada por las disidencias de las Farc, tantos los soldados y policías tienen la orden de evitar al máximo recorrer las zonas rurales de los municipios de esta parte del país porque es real la intención de este grupo armado al margen de la ley de asesinarlos.

“Debemos cuidarnos de los milicianos o de los francotiradores, más cuando estamos en las veredas, como en el caso de Guachené, donde sabemos que es numerosa la presencia de milicianos del frente Dagoberto Ramos y que tienen la orden de asesinarnos, eso también explicaría por qué nos vimos impedidos de ir a recuperar el taxi”, explicaron los patrulleros que conocieron esta situación, registrada el pasado domingo cuando Alexander Gil salió del sector de Calipso en Cali hacia Puerto Tejada con una carrera, pero al final fue asesinado y su cadáver arrojado a los cañaduzales ubicados a un costado de la vía que va de este municipio hacia Guachené.