Herederos de la salsa: así suena Diva, la hija del gran Piper Pimienta, que retomó el legado musical de su padre

Hay un relevo generacional en la música favorita de los caleños. Estos son los nuevos artistas que continúan el legado de sus padres, pero con un estilo propio y actual.

***

El día que Alba Carolina Molina Astudillo cantó ‘Las caleñas son como las flores’ ante miles de personas, durante una teletón realizada en el Coliseo Evangelista Mora, vio llorar a su padre —el legendario Piper Pimienta— desde un lado del escenario y supo que la música, el juego que ella imitaba de su progenitor, tenía un inmenso poder.

“Fue en el año 1994 y a mi papá lo habían invitado a cantar en la teletón; yo tenía 7 años y siempre que podía lo acompañaba, pero ese día no sé por qué, antes de que él saliera a la tarima, me adelanté, cogí el micrófono y empecé a cantar”, recuerda Alba Carolina, conocida hoy como Diva La Pimienta, cantante y heredera del gran sonero caleño.

 “Yo lo miraba a él mientras cantaba y noté que estaba llorando de felicidad, se quedó inmóvil de la impresión, fue mi mamá, que estaba a su lado, quien como que lo despertó diciéndole: ‘Vaya cante con la niña, no la deje sola’, y él comentó: ‘Esta niña tiene vena para el canto’. Luego cantamos juntos y él me levantó en sus brazos”, cuenta Diva, quien es la menor de los tres hijos que tuvo Edulfamid Molina con su esposa, doña Alba Inés Astudillo.

La pequeña ‘piperacina’, como la llamaban los amigos y conocidos de su padre, aunque llevaba la música en la sangre, no tenía entre sus planes continuar por el mismo camino de Piper Pimienta, y optó por dedicarse a otra de sus pasiones, el deporte.

Con una estatura de 1,80 metros de altura, Alba Carolina estaba cualificada para el atletismo, disciplina en la que destacó, obteniendo medallas para el departamento del Valle y Colombia en diferentes campeonatos nacionales e internacionales, como corredora de 100 metros planos con salto de vallas.

De hecho, en 1998, después de la trágica muerte de Piper Pimienta, aplicó para una beca de deportista en la Universidad Católica de Puerto Rico, donde vivió por más de 8 años y, además, se graduó como trabajadora social.

La ciudad donde permaneció fue en otra cuna de la salsa, nada menos que Ponce, donde nacieron Héctor Lavoe, ‘Cheo’ Feliciano, Pete ‘El Conde’ Rodríguez, Yolanda Rivera, entre otros.

“No perdí nunca mi conexión con la salsa, allá también encontré personas que reconocían a mi padre, aunque comprobé que ellos se han ido inclinando por otros géneros, está más viva la cultura salsera en Cali”, comenta.

Cuando regresó a Cali, continuó dedicada a su trabajo profesional, al tiempo que estudió técnica vocal en el Instituto Departamental de Bellas Artes, pero había dejado su pasión musical para la familia, hasta que doña Alba Inés comenzó a motivarla, “a tu papá le hubiera gustado verte convertida en artista”.

Así fue como en 2023, luego de consultarlo con sus hermanos, Katherin, la mayor, y Edulfamid Jr., el hijo de en medio, teniendo la bendición que recibió en vida de su padre, y la confianza de su madre, nació Diva La Pimienta, la artista que 27 años después retomó el legado de Piper Pimienta.

Su primera presentación fue en el Mulato Cabaret el 17 de octubre del 2024. “Aunque cante para el mundo, solo quiero que me escuches tú”, dice la letra de ‘Sombra de un pasado’, el bolero de The Latin Brothers que inmortalizó Piper Pimienta en 1975 y que su hija cantó sola aquella noche, aunque orgullosa de mantener el recuerdo vivo de su padre.

“Era como estar viéndolo a él”, expresa doña Alba, quien no pudo evitar las lágrimas cuando vio y escuchó de nuevo a su hija en el escenario.

Desde entonces, la carrera de Diva La Pimienta empezó a crecer, al poco tiempo entró en contacto con el productor y arreglista Óscar Iván Lozano (OILO), director de la orquesta de Willy García, quien la llevó al estudio para grabar unas nuevas versiones de canciones clásicas de su padre, como ‘Las caleñas son como las flores’ y ‘Sombra de un pasado’, así como tres temas propios de la artista, ‘La diva de la rumba’, ‘Van de la mano’ y ‘Tumbador’, que suenan a la salsa clásica, pero con sabor Pacífico.

“Yo soy una afrodescendiente empoderada que hace salsa fresca, honrando el legado de mi padre, y también imponiendo mi propia marca, una voz con fuerza femenina”, expresa ella.