El ícono del rap, Sean ‘Diddy’ Combs, fue condenado este viernes a 50 meses de prisión por prostitución

La figura del rapero y productor Sean “Diddy” Combs, también conocido como Puff Daddy, P. Diddy, ha sido objeto de una de las caídas más dramáticas en el mundo del entretenimiento y el poder.

Y es que se acaba de confirmar que este viernes, un tribunal federal en Nueva York lo sentenció a 50 meses de prisión (cuatro años y dos meses), tras un juicio que expuso un patrón de abuso, coerción sexual y festejos sexuales de alto nivel.

La fiscalía había solicitado 11 años de cárcel para Combs, pero el juez Arun Subramanian dictó una sentencia de 50 meses. No obstante, según información de agencias, este destacó una aparente falta de remordimiento del acusado, afirmando que Combs ha “impugnado rotundamente su culpabilidad objetiva”.

Cabe decir que, el artista había permanecido hasta hoy, en una cárcel de Brooklyn, en Nueva York.

Hace unos días, en una carta enviada al juez, el exrapero y empresario de 55 años pidió perdón y “misericordia” y dijo estar “destrozado” por lo que hizo tras “perderse en las drogas y los excesos”.

En julio, luego de dos meses de deliberaciones en Nueva York, el jurado desestimó los cargos más graves por tráfico sexual y conspiración, evitándole la cadena perpetua.

Los seis hijos adultos de Combs realizaron una emotiva súplica a favor de su padre, y el mayor, Quincy Brown, lo calificó de “un hombre cambiado”. “Por favor, por favor, denle a nuestra familia la oportunidad de sanar juntos”, reclamó una de sus hijas, D’Lila Combs.

Ahora bien, luego de conocerse la sentencia, el juez penal también anunció que el artista, deberá pagar, ahora, una multa de 500.000 dólares por los daños cometidos.

La cantante Cassie, una de las víctimas de la estrella y quien fue su novia entre 2007 y 2018, instó al juez a considerar “las muchas vidas que Sean Combs ha perturbado”.

“Todavía tengo pesadillas, flashbacks diarios y sigo necesitando atención psicológica”, escribió en una carta, afirmando que ella y su familia habían abandonado el área de Nueva York por temor a represalias si “Diddy” Combs era liberado.

Según se conoció en su momento, el artista obligó a varias mujeres —incluidas Cassie y una pareja más reciente que testificó bajo el seudónimo de “Jane”, a participar en maratones sexuales con prostitutos masculinos mientras él se masturbaba o grababa.

Según los relatos de las mujeres, este las hacía partícipes de salvajes orgías, que a veces duraban varios días de manera ininterrumpida. En estas, según su exnovia Cassie, llegó a tomar drogas como éxtasis, ketamina y cocaína, que le “ayudaron” a poder soportarlo

“No quería sentir lo que estaba pasando realmente en mi mente, en mi vida, en tiempo real. Era sólo una vía de escape para mí”, aseguró la mujer.

En un allanamiento a su casa, los oficiales encontraron más de un centenar de juguetes sexuales, aceites, entre otros elementos, para mantener estas prácticas y satisfacer sus deseos sexuales.