Economía
Presidente de General Motors para Sudamérica habla sobre el cierre de fábrica en Colombia
Santiago Chamorro en una entrevista con la Revista Semana cuenta las razones por las que llevaron al cierre de la planta en Bogotá y advierte que las operaciones comerciales continúan por medio de los concesionarios de Chevrolet.
El pasado viernes 26 de abril del 2024, el país conoció una lamentable noticia para la economía nacional que dejó sin empleo a más de 800 trabajadores: el cierre de la planta Colmotores de General Motors (GM) en Bogotá tras casi siete décadas de operación.
Ante esto, el presidente y director de GM Suramérica, Santiago Chamorro, en una entrevista con la revista SEMANA recientemente habló sobre cómo se tomó la decisión de terminar la operación en territorio colombiano, que pasó con sus más de 800 empleados y qué harán con el terreno que por años albergó esa emblemática fábrica automovilistica en Bogotá.
En primer lugar, Chamorro asegura que el punto de quiebre para decidir cerrar las operaciones en el país fue que hace algunos años invirtieron 200 millones de dólares en montar una planta de estampado en piezas metálicas en una zona franca en Colmotores y recientemente en vender el Chevrolet Joy, pero la empresa se encuentra con una producción bastante baja.
“Deberíamos estar vendiendo 40.000 y estamos con una producción cercana a las 11.000 unidades. La utilización de la planta es de solo 9 % y eso hace que realmente se vuelva un tema insustentable y que nos lleve a la triste decisión de cerrar operaciones”, detalló al respecto.
Sin embargo, advirtió que GM continuará en el país con sus operaciones comerciales por medio de sus concesionarios de la marca Chevrolet y Chevyplan.
Asimismo, se refirió sobre la actual situación financiera de GM Colmotores de la que dijo que hay un aumento de presión competitiva, con un volumen más bajo de producción, con un uso tan bajo de la capacidad de producción (de solo el 9 %). “Los resultados financieros no son buenos y se hacen insustentables en el largo plazo. Por esa razón, tomamos la decisión de no continuar con la producción, pero comercialmente seguimos adelante”.
El Gobierno Nacional y la decisión de cierre
Chamorro aclaró al medio mencionado que nada tuvo que ver la actual incertidumbre social y política de Colombia con la decisión del cierre de GM, ya que “Es un tema de largo aliento”. Además, hizo énfasis en que también tomaron la decisión de cerrar su planta en Ecuador simultáneamente, resaltando que ambos países atraviesan temas políticos y económicos diferentes.
“Es un tema de larga trayectoria y que viene año a año haciéndose más difícil en materia de competitividad”, enfatizó.
Sobre si General Motors tuvo reuniones con el Gobierno Petro antes de tomar la decisión, el empresario sostuvo que si, al igual que con gobiernos anteriores, y resaltó que con el apoyo de la actual administración lograron la inauguración de la producción del Chevrolet Joy en el país hace poco menos de dos años.
“Realmente tenemos políticas industriales que nos trajeron hasta aquí. Lo que pasa es que esas políticas industriales se vuelven insuficientes al comparar con 20 años de balance, que tenemos en materia de escala”.
Asimismo, destacó que el diálogo con este gobierno y con los anteriores siempre se ha dado de manera positiva en donde se ha intentado encontrar la forma de hacer en la industria del país.
Los trabajadores que perdieron su empleo
En cuanto a los trabajadores que se vieron afectados por esta decisión, el presidente y director de GM Suramérica dio a conocer que son 550 personas asociadas al tema de manufactura y operaciones de planta que son objeto de este asunto. Además, indicó que les hizo una oferta por encima de los temas legales, el cual incluye un paquete de transición laboral, que quiere ayudarlos a mejorar su perfil para que puedan conseguir empleos en otras empresas y ayudar a los que son microempresarios o tienen planes de serlo.
“Este paquete incluye la reubicación en otras empresas en el mercado, que estamos preparando para que salgan en este mercado laboral. Registro que una inmensa mayoría firmaron ya sus cartas de mutuo acuerdo y se están acogiendo a estas posibilidades”, sostuvo Chamorro.
Por último, sobre el terreno que albergó a la fábrica, asegura que una posibilidad es que se convierte en “una buena solución para la ciudad de Bogotá, por su ubicación y por sus condiciones”, y los materiales que tienen allí, algunos se van a reciclar y otros a chatarrizar.