Economía
“Desabastecimiento de medicamentos tiene múltiples causas”: representante de farmacias habla sobre el mercado nacional
Los retrasos en resolver los trámites por parte del Invima podría ser una de las causas de que no se consigan algunos productos.
El Instituto Nacional de Vigilancia de Medicamentos y Alimentos, Invima, llegó a tener un retraso en resolución de trámites de 26.000 y a diciembre de 2023 habían logrado evacuar más de 8000, es decir, que tenían 18.000 aún pendiente por resolver.
Para algunos agentes del sector, incluyendo pacientes, esta podría ser una de las causas por las que aún hay algunos medicamentos desabastecidos en el mercado nacional, situación que se ve todos los días cuando las personas acuden a las farmacias de las EPS y salen con cara desinflada cuando les dicen “no hay”.
Sin embargo, Claudia María Sterling Posada, vicepresidenta de Asuntos Corporativos Femsa Salud Colombia Droguerías y Farmacias Cruz Verde, dice que las causas de esa situación pueden ser muchas.
¿Cree que el atraso que tiene Invima en resolver los trámites tiene que ver con el desabastecimiento de algunos productos?
El atraso en los registros sanitarios es una de las causas que incide en la escasez de medicamentos, sin embargo, es importante entender que el tema de la escasez es multicausal. Hay causas adicionales que afectan su disponibilidad, referidas al incremento de la demanda, restricciones por marcas o fabricantes en la contratación entre EPS y gestores, problemas de adquisición de materias primas y pérdida de interés por parte de la industria en comercializar algunos productos de baja rentabilidad y escasez de algunas marcas comerciales.
Asimismo, influye la tasa de cambio y temas de logística internacional -en donde la guerra de Ucrania, el conflicto en Gaza, y la sequía en el canal de Panamá han sido situaciones relevantes-.
También es importante indicar que otra de las causales de escasez ha sido la falta de actualización anual de los precios de los medicamentos sujetos a precio controlado por parte de la Comisión Nacional de Precios de medicamentos y dispositivos médicos, la última de las cuales se realizó a principios de 2022.
Asimismo, el flujo de dinero en el sistema de salud es crucial para garantizar el suministro de medicamentos. En este punto, la falta de recursos ha llevado a retrasos en los pagos y deudas considerables por parte de los aseguradores a los gestores farmacéuticos y por ende, de éstos hacia la industria farmacéutica, situación que se ha visto agravada en los últimos meses.
@invimacolombia superó la meta de trámites por evacuar en la primera fase del plan de choque ordenado por @tacundinamarca @MinSaludCol @infopresidencia pic.twitter.com/83qrhplaFt
— Invima (@invimacolombia) January 27, 2024
Otro aspecto también relevante tiene que ver con el aumento de la demanda de medicamentos cuya causas inferidas son la liquidación de EPS (cuando un usuario de una EPS liquidada, que no atendía sus necesidades, pasa a una EPS que sí cumple, aumenta la demanda), la contención en épocas de pandemia que hizo que, una vez terminada la misma, las personas volvieran al médico y se incrementó la demanda, así como la incertidumbre generada por la reforma a la salud, situación que ha hecho que la gente, en prevención de “lo que pueda pasar”, acuda más a servicios de salud para obtener su medicación.
¿Qué afectaciones tienen las empresas del sector?
Según Fenalco, para algunos productos, los niveles de servicio oscilan entre el 0% y el 63%, y ello impacta negativamente en la salud de los usuarios que pueden ver interrumpidos sus tratamientos, así como en el incremento de PQRs y, en general, en la calidad de vida de un paciente que requiere un producto farmacéuticos para mantener su salud y bienestar.
¿Cuáles son los sectores más impactados con esta situación y en qué se están viendo reflejado?
En realidad, todos los actores de la cadena de suministro de medicamentos se ven afectados por la escasez de medicamentos. Es una cadena que involucra y afecta principalmente a la industria farmacéutica, a las casas importadoras, a los gestores farmacéuticos, a las EPS, así como a las clínicas y hospitales. En medio de todo, los pacientes, que son los principales demandantes, son los que más reciben el impacto de la insuficiencia de medicamentos en el canal institucional.
A nivel de categorías, se han visto afectaciones en medicamentos oncológicos y de VIH pediátricos, en medicamentos de control prenatal, antihipertensivos, medicamentos para enfermedades huérfanas, entre otras, pues cada mes va variando la afectación.
¿Cuál es la petición para el Gobierno Nacional para que esta situación se resuelva?
Obviamente es necesaria una reestructuración del Invima, cuya necesidad ha sido reconocida por la misma entidad y por el Ministerio de Salud, para ponerlo a tono en tecnología de punta para una mayor agilidad y menor riesgo de corrupción en los trámites, así como el fortalecimiento de su planta de personal y metodologías y procesos adecuados y menos burocráticos, para una evacuación más ágil de los trámites pendientes.
Adicionalmente, es necesario que el Invima pueda resolver el problema en el corto plazo, con medidas tales como la importación de algunos medicamentos con oferta limitada a través de mecanismos como la declaración de ciertos productos como vitales no disponibles.
Por parte del Ministerio de Salud, es importante que fortalezca el sistema de monitoreo con alertas tempranas sobre posibles casos de desabastecimiento de medicamentos para realizar el seguimiento a las cantidades que se producen (o importan) y las que se prescriben en el canal institucional y en el canal comercial. Es necesario contar con información en línea sobre la brecha entre las necesidades y las existencias de medicamentos, con el objetivo de estimar con mayor precisión las necesidades a mediano y largo plazo, y generar las alertas tempranas de escasez.
También el Gobierno debería impulsar incentivos para la producción local, no solo de medicamentos sino de materias primas requeridas para su elaboración, como también, seguir promoviendo los medicamentos genéricos – en algunos países inclusive ya opera la intercambiabilidad automática en farmacias para medicamentos que no son de estrecho margen terapéutico -. Una industria nacional fuerte le permitiría al país tener una mayor autonomía sanitaria y mejorar el acceso a los medicamentos porque su precio promedio en el exterior, en muchas ocasiones, es superior al de los medicamentos que se fabrican en el país. los medicamentos importados suelen tener precios más altos que los medicamentos locales.
De otro lado, consideramos es importante que exista un precio piso para la regulación del mercado de los medicamentos que se comercializan a un precio superior en el exterior, para evitar que la industria farmacéutica local dirija su producción hacia la exportación y no hacia el mercado interno, lo cual es competencia de la Comisión Nacional de Regulación de precios de medicamentos.
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