Cómo Hacer
Truco casero para lavar un edredón de plumas en la lavadora
Lavar un edredón de plumas en casa puede ser un proceso sencillo si sigues las pautas y precauciones adecuadas.
Lavar un edredón de plumas puede parecer una tarea desafiante debido a la delicadeza de sus materiales. Sin embargo, con los cuidados adecuados, puede mantenerlo limpio y esponjoso sin necesidad de llevarlo a la tintorería.
Preparación antes de lavar
Antes de colocar el edredón en la lavadora, es importante prepararlo adecuadamente:
- Revise la etiqueta de cuidado: Antes de cualquier cosa, verifique la etiqueta del edredón. Esta le dará información crucial sobre las recomendaciones del fabricante, como la temperatura del agua, el tipo de detergente y si es seguro lavarlo en casa.
- Inspecciona el edredón: Revise el edredón para detectar rasgaduras, costuras sueltas o cualquier daño previo. Si encuentra algún problema, es mejor repararlo antes de lavarlo para evitar que se agrave durante el lavado.
- Quite las manchas visibles: Si hay manchas en el edredón, trate de quitarlas antes de lavarlo. Utilice un detergente suave o un quitamanchas apropiado, aplicándolo en el área afectada y frotando suavemente con un paño limpio.
- Cómo lavar el edredón de plumas en la lavadora
Lavar un edredón de plumas requiere un enfoque cuidadoso para no dañar las plumas ni la tela exterior. conozca cómo hacerlo:
- Use una lavadora de gran capacidad: Los edredones de plumas pueden ser voluminosos, por lo que necesitará una lavadora de gran capacidad, preferiblemente una de carga frontal. Las lavadoras de carga superior con un agitador central pueden dañar el edredón y no permitir un lavado uniforme.
- Seleccione el ciclo adecuado: Elija un ciclo de lavado suave o delicado para minimizar el desgaste. Utilice agua fría o tibia, según las instrucciones de la etiqueta, ya que el agua caliente puede dañar las plumas y hacer que pierdan su capacidad de aislamiento.
- Detergente adecuado: Utilice un detergente suave, preferiblemente uno específico para ropa delicada o productos de plumón. Evite el uso de detergentes fuertes, suavizantes de telas o lejía, ya que pueden dañar las plumas y afectar la suavidad del edredón.
- Carga equilibrada: Asegúrese de que el edredón esté bien distribuido dentro de la lavadora para evitar que se desbalancee durante el ciclo. Puede añadir algunas toallas para equilibrar la carga y mejorar el proceso de lavado.
- Enjuague adicional: Es recomendable programar un ciclo de enjuague adicional para asegurarse de que se eliminen todos los residuos de detergente. Los residuos pueden hacer que las plumas se aglomeren y afecten la esponjosidad del edredón.
Secado del edredón de plumas
El secado es una de las partes más críticas del proceso, ya que un mal secado puede resultar en plumas apelmazadas o en la aparición de moho.
- Utilice una secadora de gran capacidad: Al igual que con el lavado, es mejor usar una secadora de gran capacidad. Esto permitirá que el edredón tenga espacio para moverse y secarse de manera uniforme.
- Ajuste la temperatura: Configure la secadora en un ciclo de baja temperatura o aire frío. El calor excesivo puede dañar las plumas, hacer que pierdan su forma o incluso quemarlas.
- Secado prolongado: El secado completo de un edredón de plumas puede llevar varias horas. Asegúrese de revisar el edredón cada 30 minutos y sacudirlo ligeramente para redistribuir las plumas y acelerar el proceso de secado.
- e. Secado al aire (opcional): Si prefiere no usar la secadora o si el edredón aún está húmedo después de secarlo, extiéndalo sobre una superficie plana en un área bien ventilada para que termine de secarse al aire. Evite exponerlo directamente al sol para prevenir daños en la tela y las plumas.
Precauciones adicionales
Además del proceso de lavado y secado, es importante tomar ciertas precauciones adicionales para garantizar la longevidad del edredón de plumas:
- Lavar con poca frecuencia: Los edredones de plumas no necesitan lavarse con frecuencia. Lávelos solo cuando sea necesario, como una o dos veces al año, para evitar el desgaste de las plumas y la tela.
- Uso de una funda protectora: Utilice una funda de edredón para protegerlo del polvo, la suciedad y las manchas. Esto reducirá la necesidad de lavados frecuentes y prolongará la vida útil del edredón.
- Almacenamiento adecuado: Cuando no esté usando el edredón, guárdelo en una bolsa de algodón transpirable. Evite las bolsas de plástico, ya que pueden atrapar la humedad y causar la aparición de moho o malos olores.
- Evitar el peso excesivo: No coloque objetos pesados sobre el edredón mientras se está almacenando o utilizando, ya que esto puede aplastar las plumas y afectar su capacidad de aislamiento.
*Este artículo fue creado con ayuda de una inteligencia artificial que utiliza machine learning para producir texto similar al humano, y curado por un periodista especializado de El País.