Estos son los beneficios que se obtienen al hervir las verduras con bicarbonato

El bicarbonato de sodio es uno de los ingredientes más versátiles de la cocina, ayuda a desinfectar, sirve para hacer remedios caseros y ayuda a darle esponjosidad a ciertas preparaciones.

Con el tiempo, se ha convertido en la mano derecha en el hogar, por lo que es un elemento infaltable en casa.

Benficios de hervir las verduras en bicarbonato

Este ha sido un truco milenario, sin embargo, ahora ha vuelto a tomar fuerza y cada vez son más las personas que han decidido ponerlo en práctica.

De acuerdo con el blog de cocina A Hundred Years Ago, de la autora Sheryl Lazarus, “el bicarbonato de sodio ayuda a que las verduras se cocinen más rápido y mejor”.

Esta es la razón por la que este consejo de las abuelas se ha vuelto tan popular.

El portal estadounidense de recetas Taste of Home, explica que hervir las verduras es una de las maneras más saludables de prepararlas y al agregar bicarbonato de sodio al agua de cocción puede volverla alcalina en lugar de ácida, lo hace que conserve el color vibrante de las verduras de hoja verde, como el brócoli, espinacas o repollo.

Este medio alcalino evita que el hidrógeno reemplace al magnesio de la clorofila, impidiendo que se tornen marrones o grises durante la cocción.

Además, el bicarbonato de sodio suaviza el agua, acelerando el tiempo de cocción y dejando las verduras más tiernas.

Este es un buen truco cuando se trata de cocinar vegetales que tienen muchas fibras, como el repollo, ya que ayuda a neutralizar su acidez natural y a suavizar su gusto.

Aunque este consejo casero es muy útil, hay que ponerlo en práctica con precaución, ya que el medio alcalino resultante puede destruir vitaminas sensibles como las del grupo B y la vitamina C, lo que afecta el valor nutricional de los vegetales.

La manera adecuada de usar bicarbonato de sodio en la cocción de verduras

Según explica el medio La Nación de Argentina, este es el paso a paso que debe seguir para que sus verduras queden perfectas:

1. Llenar una olla con agua suficiente para cubrir las verduras.
2. Agregar una pizca de bicarbonato de sodio.
3. Poner a hervir el agua.
4. Cuando alcance su punto de ebullición, añadir las verduras y dejar que se cocinen.
5. Una vez estén tiernas y con un color brillante, pasar las verduras a otro recipiente con agua helada durante 1 o 2 minutos.
6. Por último, escurrir y servir.

No olvide que no debe prolongar el tiempo de cocción, pues las verduras pueden perder sus propiedades nutritivas al estar expuestas a demasiado tiempo a altas temperaturas.