¿Qué se puede limpiar con mandarina?

La mandarina, además de ser una fruta deliciosa y nutritiva, posee propiedades que la convierten en un aliado natural para la limpieza del hogar. Su alto contenido en ácido cítrico, d-limoneno y aceites esenciales la convierten en un desengrasante natural, desinfectante y aromatizante.

Superficies brillantes sin químicos

Las cáscaras de mandarina son ideales para limpiar superficies como mesas, mesones, azulejos y ventanas. Para ello, se puede frotar la cáscara directamente sobre la superficie o preparar un spray con jugo de mandarina y agua. El ácido cítrico eliminará la grasa y la suciedad, mientras que el d-limoneno dejará un brillo natural.

Un hogar con aroma a frescura

Las mandarinas también son un aliado perfecto para eliminar malos olores y aromatizar el hogar. Se pueden colocar cáscaras de mandarina en diferentes espacios como el refrigerador, el baño o el cesto de la ropa. También se puede preparar un ambientador natural con jugo de mandarina, agua y alcohol.

Recomendaciones para aprovechar al máximo las mandarinas en la limpieza

• Elegir mandarinas orgánicas: Para evitar la exposición a pesticidas, es recomendable elegir mandarinas orgánicas.
• Utilizar cáscaras frescas: Las cáscaras de mandarina frescas son más efectivas para la limpieza.
• Evitar la exposición al sol: El jugo de mandarina puede manchar las superficies si se expone al sol.

Beneficios de usar la mandarina para la limpieza

• Ecológica y económica: La mandarina es un producto natural y biodegradable, lo que la convierte en una alternativa ecológica a los productos de limpieza comerciales. Además, es una opción económica ya que se puede aprovechar un producto que normalmente se desecha.
• No irrita la piel: La mandarina es un producto suave que no irrita la piel, lo que la hace ideal para personas con piel sensible.
• Aromaterapia: El aroma cítrico de la mandarina tiene propiedades relajantes y estimulantes, lo que puede contribuir a crear un ambiente agradable en el hogar.

*Este artículo fue creado con ayuda de una inteligencia artificial que utiliza machine learning para producir texto similar al humano, y curado por un periodista especializado de El País.