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Por culpa de un duende no han encontrado a los menores desaparecidos en la selva, según un familiar
Las labores de búsqueda ya se han extendido por más de 15 días.
Las esperanzas por encontrar a los cuatro menores desaparecidos en la zona selvática del Caquetá, luego del accidente de una avioneta que iba rumbo a Guaviare, aún se encuentran intactas. Sin embargo, recientemente un familiar de estos niños manifestó que localizarlos no sería tan fácil debido a una fuerza paranormal.
Es importante resaltar que estos menores ya completan más de 15 días perdidos en la selva del Caquetá, por lo que las autoridades han intensificado los esfuerzos para poder localizarlos con vida, teniendo en cuenta sus cortas edades (13 años, 9 años, 4 años y 1 año).
Sin embargo, recientemente Fidencio Valencia, el tío abuelo de estos cuatro menores, manifestó en entrevista con el Periódico del Meta que estos están capturados por un duende, lo que ha hecho que se dificulte que las autoridades den con su paradero.
“Este no es el primer caso que ha pasado con nosotros, por ejemplo en diferentes partes del Amazonas se han perdido muchachos y siempre han dicho que eso es lo que pasa, son los misterios de la selva. Cuando una persona se pierde, ellos (los duendes) son los que los cargan”, informó Valencia.
Por ello, el familiar de los menores argumentó que, por más que las autoridades se esfuercen, es necesario algo más que solamente equipos de búsqueda del Ejército Nacional y las demás entidades que apoyan en el proceso.
“Por eso es que digo que es necesario contar con las autoridades tradicionales de los territorios, que espiritualmente nos podrían ayudar para que el duende entregue de nuevo a los niños y los deje en algún lugar”, agregó Valencia.
Se debe recordar que las autoridades aún guardan las esperanzas de encontrar a los menores debido a algunas pistas que han encontrado de su supervivencia, entre las cuales están huellas, frutas mordidas, tijeras y hasta teteros.
“Esos niños ya por más que griten no los van a escuchar, por ese lado ya no se puede, toca por la parte tradicional. Él es el que está haciendo que los niños boten la tijera y sus elementos porque les hace pensar que eso ya no les sirve. Él es el que los carga y por eso es que cuando las autoridades creen estar cerca, pues él hace oscurecer o llover para que los que están buscando se cansen”, puntualizó el tío abuelo de los cuatro menores.
Finalmente, Valencia recalcó que, en dado caso de encontrar a los menores, es necesario hacerles algunos procesos de medicina tradicional porque ya “tendrían el calor del duende”.
“La estrategia es que los médicos tradicionales o a los que les dicen caciques se sienten a trabajar de noche y hablar con él (el duende) para que lo entregue, de resto no hay nada”, resaltó.
Fuerzas especiales indígenas se sumaron a la búsqueda
La Operación Esperanza continúa sumando aliados y apoyos en su objetivo de localizar lo antes posible a los cuatro menores desaparecidos en las selvas entre Caquetá y Guaviare.
A los más de 150 militares que trabajan incansablemente en esta importante misión humanitaria, se han unido hoy más Comandos de las Fuerzas Especiales y un grupo de indígenas.
Patricia Tobón Yagarí, directora de la Unidad para las Víctimas, explicó que las instituciones del Gobierno Nacional y en este caso, también la Fuerza Pública, conjuntamente sostuvieron un diálogo con las comunidades indígenas para que se sumen a esta búsqueda.
“Hemos logrado llegar a un proceso de articulación en las que las comunidades indígenas, sobre todo las que tienen la experiencia, que vienen de los pueblos selváticos, que tienen también capacidades en búsqueda, van a también trabajar de la mano de las Fuerzas Especiales”, dijo Tobón.
Conforme a esto, a bordo de helicópteros del Ejército Nacional y la Fuerza Aérea, hoy fueron trasladados a la zona de búsqueda más de 20 uniformados y 10 indígenas Nukak.
Por su parte, el general Pedro Sánchez, comandante de las Operaciones Especiales, expresó que a los Comandos se van a articular estas comunidades indígenas que cuentan con una capacidad innata y muy elevada en cuanto a conocimientos sobre la selva y cómo entenderla.
“Se van a equipar o ajustar equipos en los cuales van dos de nuestra comunidad indígena con ocho de nuestros comandos, aquellos valientes que ya llevan quince días internados en medio de la selva en la búsqueda”, detalló el General Sánchez.
