Colombia
Inquietantes grietas en Puerto Escondido, Córdoba: La preocupación crece entre la población
El fenómeno se produjo a raíz de un sismo de magnitud 6.6 ocurrido el pasado miércoles.
La actividad volcánica en Colombia sigue generando miedo y preocupación en varias partes del país. El turno ahora fue para Puerto Escondido, municipio costero del departamento de Córdoba que se encuentra en alerta roja por la aparición de enormes grietas.
El fenómeno natural surgió como consecuencia de un sismo de magnitud 6.6 en la región del Urabá ocurrido el pasado miércoles, el cual, de acuerdo con los cálculos de las autoridades, afectó a un aproximado de 40 hectáreas de tierra.
“Esta zona es de alto riesgo y ese riesgo no es mitigable, es decir, no podemos realizar obras para contener la naturaleza”, detalló Jairo Baquero, secretario del Interior y Participación Ciudadana de Córdoba.
Las autoridades aseguraron que las grietas, de manera puntual, se explican debido a que después del sismo, que registró hasta 40 réplicas menores, hubo una filtración volcánica que se desplazó con dirección a la zona urbana afectada.
La situación hizo que fuera necesario declarar la calamidad pública en el municipio, así como la evacuación preventiva de alrededor de 150 familias, que tuvieron que ser llevadas a albergues temporales.
Juanchi Rhennals, un campesino de la zona, reveló lo que muchas veces se teme ante la aparición de estas grietas: que alguien caiga dentro de ellas.
“Nos causó una pérdida económica importante, puesto que cayeron a las grietas que se abrieron tres vacas y dos terneros, los dos últimos eran de una sociedad con mi madre, así que mi familia resultó afectada”, detalló Rhennals.
De hecho, las grietas alcanzan a tener hasta metro y medio de profundidad en algunas zonas, por lo que los animales de Juanchi Rhennals no fueron los únicos que cayeron en estas.
De acuerdo con fotografías que han sido compartidas en redes sociales y otros medios, la comunidad estuvo tratando de recuperar la carne de las reses fallecidas por el fenómeno.
Asimismo, desde el Servicio Geológico Colombiano informaron que al sitio se trasladarán funcionarios de la entidad para estudiar lo sucedido, ver su magnitud y que esto sirva de base ante posibles hechos nuevos y similares en otras regiones del país.
¿Cada vez tiembla más fuerte en Colombia?
En el último mes, el Servicio Geológico Colombiano (SGC) ha registrado varios sismos de alta y baja magnitud en el país que han puesto en alerta a los ciudadanos, pues se han dado réplicas seguidas que no parecieran de un evento sísmico normal.
Frente a este panorama, el SGC, entidad que mantiene el monitoreo permanente de la actividad sísmica en el país desde hace más de 30 años, respondió algunas preguntas que los ciudadanos han hecho con respecto a los fuertes movimientos telúricos que se han registrado últimamente y otras inquietudes que han surgido frente a estos hechos.
Por una parte, la entidad aclaró que esta región es sísmicamente muy activa, ya que hay diferentes placas tectónicas que están en contacto y esto hace que se generen las sacudidas de la tierra en la mayor parte del territorio. De hecho, en promedio, cada mes se pueden contabilizar hasta 2.500 temblores, pero la mayoría no son de magnitudes relevantes, muchos de ellos ni siquiera son perceptibles para las personas, solo los detectan los sismógrafos.
Asimismo, explicó que no es cierto que haya una mayor ocurrencia de temblores, pero lo que sí sucede ahora es que los ciudadanos son más conscientes de este tipo de eventos sísmicos, por lo que buscan tener a la mano todas las estrategias y los elementos para estar preparados ante un posible temblor de alta magnitud.
Entre tanto, el Servicio Geológico Colombiano, a su vez, señaló que hay un sector donde ocurren sismos casi todos los días y representa el 60 % de los movimientos ocurridos en el país: el municipio de Los Santos, en Santander. Estos, en su mayoría, no son de magnitud ni de intensidad relevante, por lo que muchos de ellos ni siquiera se sienten. Así lo ha probado la Red Sismológica Nacional, que lleva 30 años monitoreando esta actividad natural en el país.