Colombia
Así vivieron los payaneses y turistas la procesión de Nuestra Señora la Virgen de Los Dolores en Popayán
Se cumplió en la noche de este martes 15 de abril este acompañamiento a la madre de Jesús.

Francisco Calderón
16 de abr de 2025, 03:28 p. m.
Actualizado el 16 de abr de 2025, 10:25 p. m.
Cientos de payaneses y turistas se congregaron en las calles del centro histórico de Popayán en la noche de este martes 15 de abril para participar en la procesión de Nuestra Señora de La Virgen de Los Dolores.
“La procesión penitencial de esta noche nos brinda una oportunidad para meditar la pasión de Cristo, lleva el nombre de Nuestra Señora de los Dolores, paso principal en la solemnidad del Martes Santo La fiesta de la Virgen de Los Dolores ha estado siempre unido a la historia no solo de la ciudad sino de la nación entera, porque es el momento cuando la comunidad reconoce, y acompaña, el papel de nuestra virgen maría en los designios del padre creador”, explicó monseñor Iván Antonio Marín López, Obispo Emérito de la ciudad de Popayán.

La figura materna y misericordiosa de la dolorosa serena y limpia de María ataviada ricamente por la esperanza y la devoción de sus devotos de la ciudad es ahora el aporte para la paz del país, de ahí que durante el solemne recorrido, el cual inició desde el Templo de San Agustín, donde después los 16 pasos que integran esta procesión fueron cargados por las diferentes calles del cetro de la ciudad, la cual se engalanó para que los payaneses y turistas presenciarán ese amor de María hacia su hijo Jesús, en medio de tantas pruebas.
“De todas las advocaciones de la Virgen, nuestra Señora de los dolores es la más universal, pues no está vinculada a una aparición particular, sino que recuerda y considera los méritos de los dolores de la Santísima Virgen María unida estrechamente a los padecimientos de su Divino Hijo por la salvación de los hombres. Junto a Él, Ella lo sufrió todo por nosotros para que disfrutemos de la gracia, de la redención, sufrió para demostrarnos su amor: La profecía de Simeón, la huida a Egipto, el Niño Jesús perdido en el Templo, el encuentro de Jesús y María camino al Calvario, la Crucifixión, el cuerpo de Jesús bajado de la cruz y el entierro de Jesús”, ilustró por su parte el padre Javier Humberto Porras, párroco del templo San Agustín.

Antes de abrirse la procesión de esa noche, donde por fortuna no llovió, las personas que prestan el servicio de enlucir la ciudad pasan limpiando y barriendo las calles por donde desfiló la procesión, como signo para que todos los que iniciamos esta Procesión limpiemos nuestros corazones, mirándonos hacia adentro allí donde reside el pecado y las tinieblas, explicó por su parte Adrián Tintinago, periodista y carguero, quien es uno de los comunicadores payaneses que explica a los demás colegas de Popayán los detalles de esta tradición religiosa.
“Y nos apresuramos luego acudir al Sacramento de la Reconciliación y del perdón para vivir la Pascua renovados. Como cristianos miramos en estos hermanos nuestros, personificada toda la clase obrera y trabajadora”, agregó Tintinago, quien junto con su familia en esta ocasión salió a alumbrar, sumándose a esta multitud de fieles que ven en la Virgen María la madre protectora que siempre está al lado de las personas en medio de las dificultades que trae el mundo.

Por eso, muchos de los feligreses aprendieron, durante esta procesión, que, acuerdo con las enseñanzas de la Biblia, los dolores que enfrentó la Virgen María fueron siete:
- Primer dolor: una profecía de Simeón en la presentación del Niño Jesús tras su nacimiento, muestra de que se cumplía los designios de Dios.
- Segundo dolor: La huida a Egipto con el Niño Jesús, escapando de la orden de asesinato por parte de Herodes, quien sacrificó a muchos pequeños de la época para acabar con el Salvador, muestra de que gracias a ese amor maternal, el pequeño hijo de Dios se salvó de morir.
- Tercer dolor: Con 12 años, la pérdida durante tres jornadas de Jesús en el Templo de Jerusalén, como lo conocemos en el Rosario.
- Cuarto dolor: El encuentro de madre e hijo en el camino de este al Calvario.
- Quinto dolor: La crucifixión y posterior agonía de Jesucristo.
- Sexto dolor: El recibimiento del cuerpo sin vida de Jesús por parte de la Virgen María, después de ser bajado de la cruz.
- Séptimo dolor: El entierro de Jesucristo y la soledad que sintió tras el suceso la Virgen María.

Francisco Calderón
Soy comunicador social de la Universidad Santiago de Cali y periodista radicado en Popayán desde hace más de 15 años, pero con nacionalidad caleña. Además, soy reportero judicial en una de las regiones más hermosas del mundo, el Cauca.
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