Toro, el perro policía que caza ‘narcoencomiendas’, este fue su último hallazgo en Cali

Redes de narcotráfico que operan en el Valle del Cauca recibieron un fuerte golpe en las últimas horas, cuando integrantes de la Unidad Nacional de Intervención Policial (UNIPOL), en medio de operativos realizados en la ciudad de Cali, descubrieron un nuevo cargamento de drogas ilícitas que tendría como destino Antioquia.

Este nuevo hallazgo fue posible gracias a la colaboración de “Toro”, un canino dedicado a tareas de identificación de drogas y que acompañó el operativo, que se desarrolló en las bodegas de una empresa dedicada a la mensajería de paquetes en el centro de la capital vallecaucana.

“Toro”, como se le conoce al perro, fue pieza clave para el éxito de esta misión, pues fue gracias a sus habilidades que agentes de la Policía pudieron encontrar los paquetes con droga. Estos habían sido empacados en bolsas y forrados con cintas de color negro y café, y estaban escondidos en baldes plásticos que simulaban contener pintura en su interior.

Este nuevo cargamento de drogas, compuesto por 154 kilos de marihuana tipo creepy, tendría como destino final el municipio de Apartadó, en Antioquia. Sin embargo, gracias a la oportuna acción por parte de uniformados de la UNIPOL y Toro, posible en el marco de una jornada de registro y control previa solicitud por parte del personal de seguridad, se logró incautar este material y ponerlo a disposición de las autoridades competentes.

Toro y su invaluable ayuda en la lucha antinarcóticos

Cabe añadir que esta no es la primera vez que el canino se destaca por ser de ayuda en operaciones que buscan encontrar droga camuflada en lugares sospechosos. Ya en 2023, este perro y otro de sus compañeros, conocido como “Tino”, fueron pieza clave en una operación de registro y control llevadas a cabo por las autoridades en empresas de envío en el barrio Calima, en Cali, y en el municipio de Yumbo.

En aquella ocasión los perros hicieron parte del equipo que logró la incautación de 7.400 gramos de ziploc y marihuana, que tenían como destino las ciudades de Bogotá, Ipiales y Armenia. La droga habría sido ocultada en puertas, mesas y suplementos multivitamínicos, lo que no fue un problema para el olfato y las habilidades de los animales.

Las autoridades continúan realizando este tipo de registros confiando en que sus compañeros caninos seguirán brindándoles colaboración para seguir asestándoles golpes a grupos delincuenciales dedicados al tráfico de drogas a lo largo y ancho de la región.