SALUD
Hallazgos en la investigación del autismo: descubren sustancia que revela vínculos con cambios neuronales
En un estudio de científicos israelíes, se reveló que los altos niveles de óxido nítrico en el cerebro pueden ser claves en la condición de las personas con autismo.
Los llamados trastornos del espectro autista o condición del espectro autista tienen un amplio grupo de afectaciones al neurodesarrollo de las personas que la padecen. En pocas palabras, la mayoría presentan algún grado de de dificultad en la comunicación, desafíos sensoriales y algunos comportamientos repetitivos.
De acuerdo con un estudio de la Organización Mundial de la Salud (OMS), al menos un niño de cada 100 padece autismo en el mundo. Y según su teoría, “la evidencia científica disponible indica la existencia de múltiples factores, genéticos y ambientales, que hacen más probable que un niño pueda padecer este trastorno”.
En el pasado, diferentes estudios vincularon este tipo de mutaciones genéticas a algunas características asociadas con el autismo, sin embargo, los mecanismos no fueron detectados con mucha seguridad.
Pues bien, recientemente en una nueva investigación realizada con animales en laboratorio y que apareció publicada en la revista Advanced Science, se dice que el óxido nítrico es clave en las funciones neuronales.
Dicho estudio, que además fue desarrollado por el reconocido farmacólogo y neurocientífico Haitham Amal (investigador principal de la Universidad Hebrea de Jerusalén), encontró una correlación directa entre los altos niveles de óxido nítrico y el desarrollo del autismo.
“Debemos dejar claro que todavía no sabemos con exactitud si el óxido nítrico conduce al autismo. Lo que sabemos es que es un factor clave. También identificamos que la reducción de sus niveles reduce los fenotipos de este trastorno”, sostuvo Amal.
El óxido nítrico
El investigador Amal ya había participado en diferentes investigaciones sobre el óxido nítrico en Massachusetts, Estados Unidos, y de hecho en sus primeros trabajos había demostrado que esta sustancia química en el cuerpo puede cambiar la función de algunas proteínas.
Por ejemplo, en el cerebro, los niveles de óxido nítrico son los directamente responsables del flujo sanguíneo, el crecimiento neuronal y el metabolismo. Pero, evidentemente, a niveles elevados, la molécula puede llegar a causar daño y alterar algunos procesos celulares.
En dicho estudio, se pudo comprobar que los niños con trastorno de autismo presentaban, precisamente, un alto nivel de óxido nítrico.
“Nuestros hallazgos en este estudio mostraron que el óxido nítrico afecta algo llamado la expresión de proteínas neuronales clave que son importantes para el desarrollo del cerebro. Creemos que esto conduce a la degradación de estas proteínas”, dijo Amal con autoridad sobre lo que fue su investigación, que está siendo comentada por todo el mundo.
¿Se pueden revertir los efectos?
Debido a que los niveles anormales del óxido nítrico provocan cambios atípicos en los llamados niveles de proteínas neuronales, las personas a cargo de este estudio se preguntaron si las características moleculares y conductuales del autismo podrían revertirse mediante la falta de este químico. Hicieron algunas pruebas en ratones y los resultados fueron reveladores.
Al respecto, Amal sostuvo: “Los modelos de ratón con altos niveles de óxido nítrico mostraron déficits sociales, búsqueda reducida de novedades, comportamiento repetitivo y también algo de ansiedad. Cuando redujimos los niveles, nos encontramos una reversión de la mayoría de las características de esta patología, lo cual fue algo muy significativo para esta investigación que hemos venido realizando”.
“Esta investigación que hemos realizado es un avance significativo en la investigación del autismo, con una primera conexión clara y directa entre un aumento en la concentración del óxido nítrico en el cerebro y el comportamiento de las personas con autismo. Mi esperanza es que con nuestra nueva comprensión, podamos comenzar a desarrollar medicamentos terapéuticos y ayudar a millones de niños y adultos que viven con autismo alrededor de todo el planeta”, concluyó Amal, el ‘padre’ de este importante estudio que le interesa a todo el mundo.