Salud
Cuidado: este es el tipo de cáncer que se puede confundir fácilmente con una enfermedad común
Es importante que la persona busque atención médica de inmediato si nota cambios en la piel de la mama.
Al momento de sentir alguna molestia o síntoma inusual en el cuerpo, es clave que las personas asistan con un especialista de manera inmediata. De hecho, existe tipo de cáncer que se puede confundir fácilmente con una enfermedad común.
La Sociedad Americana de Cáncer remarca que un aspecto importante en la salud de los senos consiste en saber cómo lucen y se sienten normalmente, pues en 2022, en todo el mundo se diagnosticaron 2,3 millones de casos de cáncer de mama en mujeres, según la Organización Mundial de la Salud.
Según Mayo Clinic, el tipo de cáncer que se puede confundir fácilmente con una enfermedad común es el cáncer mamario inflamatorio. Los expertos anotan que este puede “confundirse fácilmente con una infección de mama, que es una causa mucho más común de enrojecimiento e hinchazón de los senos”.
Para ello, es importante que la persona que presente estos síntomas, busque atención médica de inmediato si nota cambios en la piel de la mama.
Cabe mencionar que el cáncer mamario inflamatorio es un tipo poco frecuente de cáncer mamario que evoluciona rápidamente y hace que la mama afectada tenga un aspecto rojo, hinchado y sensible.
Mayo Clinic precisó que este ocurre “cuando las células cancerosas bloquean los vasos linfáticos de la piel que recubre la mama, lo que hace que la mama adopte una apariencia inflamada y de color rojo característico”.
Según los expertos, este tipo de cáncer se considera uno avanzado localmente. “Se ha extendido desde su punto de origen hacia el tejido cercano y posiblemente hacia los ganglios linfáticos cercanos”.
Estos son los síntomas del cáncer mamario inflamatorio
- Cambio rápido en la apariencia de una mama, en el transcurso de varias semanas.
- Engrosamiento, pesadez o agrandamiento visible de una mama.
- Cambios de color en los que la mama toma una apariencia enrojecida, violácea, rosa o con moretones.
- Temperatura inusual en la mama afectada.
- Hoyuelos o rugosidades en la piel de la mama afectada, similar a la piel de una naranja.
- Sensibilidad o dolor.
- Ganglios linfáticos agrandados debajo de los brazos, sobre o debajo de la clavícula.
- Aplanamiento o hundimiento del pezón.