Shakira rompe récord histórico en Quito: tres noches de euforia, fuego y “Shakiramanía”

Quito vivió tres noches que quedarán grabadas en la historia del entretenimiento latinoamericano. Shakira cerró su paso por Ecuador con un éxito rotundo: tres presentaciones consecutivas con boletería agotada en el Estadio Olímpico Atahualpa, un récord nunca antes alcanzado por otro artista en el país.

El último show, realizado este martes 11 de noviembre, consolidó a la barranquillera como la artista femenina más convocante en la historia musical del Ecuador, con un impacto económico estimado en 50 millones de dólares para la capital. Fanáticos provenientes de todo el país y de naciones vecinas como Perú y Colombia colapsaron hoteles, aerolíneas y restaurantes en lo que los medios locales ya llaman “la Shakiramanía quiteña”.

El espectáculo comenzó con una hora de retraso, pero la espera valió cada segundo. Shakira apareció en el escenario envuelta en una atmósfera de luces rojas y doradas, desatando una ola de gritos que estremeció el estadio.

Durante más de dos horas interpretó sus grandes éxitos, desde Antología y Inevitable hasta Chantaje, Monotonía y Puntería, temas que reflejan la madurez de su actual etapa artística.

Previo a salir a escena, la cantante compartió con sus más de 94 millones de seguidores en Instagram un momento especial, mostró un poncho artesanal con el diseño de una loba, obsequio de un miembro de su equipo. “Miren lo que me regaló uno de los chicos del crew, cosa tan linda. Gracias, Rob”, expresó en un video que rápidamente se viralizó.

Ya en el escenario, la emoción se multiplicó cuando su equipo le confirmó, en plena tarima, que había logrado tres sold outs consecutivos en el mismo estadio. “¿En serio?”, respondió entre risas y asombro, sellando un hito para la historia musical ecuatoriana.

Con más de 60 conciertos realizados y más de 2,5 millones de entradas vendidas a nivel global, la gira Las mujeres ya no lloran Tour se consolida como la más taquillera jamás realizada por una artista latina.

En Ecuador, los tres conciertos atrajeron a más de 100.000 personas, generando un ambiente de celebración colectiva en las calles y avenidas cercanas al estadio.

Las pantallas gigantes, coreografías vibrantes y una producción escénica impecable acompañaron cada interpretación.

El público cantó al unísono los himnos de su carrera, mientras luces multicolores envolvían el lugar en una atmósfera casi mística. La cantante cerró su concierto con Waka Waka y la explosiva BZRP Music Sessions Vol. 53, temas que desataron una verdadera catarsis colectiva.