Tres ingredientes que pueden potenciar los ciclos de la lavadora

En la búsqueda de métodos más eficaces y económicos para el cuidado del hogar, cada vez más personas recurren a soluciones caseras que complementan el uso de electrodomésticos.

Uno de los ejemplos más destacados es el uso de ciertos ingredientes de cocina que, además de ser accesibles, pueden mejorar notablemente el rendimiento de la lavadora durante sus ciclos de lavado.

Entre estos, el bicarbonato de sodio, el vinagre blanco y el jugo de limón destacan por sus propiedades limpiadoras y suavizantes.

Bicarbonato de sodio

Este producto, comúnmente utilizado en repostería, es un aliado eficaz en la limpieza de ropa. Ayuda a neutralizar olores, suaviza el agua dura, potencia la acción del detergente y contribuye a eliminar manchas difíciles. Para aprovechar sus beneficios, basta con añadir media taza de bicarbonato directamente en el tambor de la lavadora antes de iniciar el ciclo de lavado.

Vinagre blanco

Con propiedades desinfectantes y desodorizantes, el vinagre blanco es ideal para eliminar restos de detergente acumulado en las prendas, suavizar tejidos y evitar malos olores en la ropa y en la propia lavadora. Se recomienda verter una taza de vinagre blanco en el compartimento del suavizante. No debe mezclarse con productos que contengan cloro (como la lejía), para evitar reacciones químicas no deseadas.

Jugo de limón

El jugo de limón, gracias a su acidez natural, es eficaz para blanquear telas y eliminar olores. Su uso es especialmente recomendable en prendas claras que requieren un tratamiento más delicado. Puede mezclarse media taza de jugo de limón con agua y añadirse al ciclo de lavado como refuerzo.

Cuidados esenciales para mantener la lavadora en buen estado

La lavadora es uno de los electrodomésticos más utilizados en el hogar, y como tal, requiere ciertos cuidados para asegurar un funcionamiento eficiente y evitar averías prematuras. A continuación, se enumeran las recomendaciones más importantes para mantenerla en óptimas condiciones:

1. No sobrecargar el tambor

Sobrecargar la lavadora no solo reduce la eficacia del lavado, sino que también puede dañar el motor, los rodamientos y el tambor. Es fundamental respetar la capacidad máxima indicada por el fabricante para cada tipo de carga.

2. Usar la cantidad adecuada de detergente

El exceso de detergente produce residuos que se acumulan en el tambor y en las mangueras, generando malos olores y posibles obstrucciones. Siempre debe utilizarse la cantidad recomendada, preferiblemente detergente líquido si se trata de lavadoras de alta eficiencia.

3. Limpiar regularmente el filtro

El filtro atrapa objetos pequeños, pelusas y restos de suciedad. Si no se limpia con regularidad, puede obstruirse y afectar el drenaje del agua. Se recomienda revisarlo al menos una vez al mes.

4. Dejar la puerta abierta después del uso

Después de cada lavado, es aconsejable dejar la puerta entreabierta para permitir la ventilación y evitar la proliferación de moho y malos olores en el tambor.