Colombia
Alejandro Gaviria: “los calificativos de vampiros, asesinos, ladrones, le hacen un daño terrible al sistema de salud”
El exministro asegura que en el gobierno Petro “siempre tuvieron muy claro lo que deberían destruir, pero no lo que tendrían que construir”.

El exministro de Salud Alejandro Gaviria, uno de los más férreos opositores a las medidas adoptadas por el Gobierno Nacional en materia de salud, con las que han desatado la peor crisis en los últimos 30 años, se refirió a los problemas que realmente originaron el caos.
Reconoce que los problemas financieros vienen de años atrás, pero aseguró que se agravaron con la decisión de presidente Gustavo Petro de no ajustar los valores reales que demandaba la UPC en el 2025 y que anda buscando culpables de la crisis de la salud de una manera paranoide, pero sin plantear soluciones.
¿Cuál es la causa real de la crisis del sistema de salud en Colombia?
El sistema de salud de Colombia, como casi todos los sistemas de salud en el mundo, tiene problemas estructurales de sostenibilidad. Esto es, que los recursos que las sociedades disponen no alcanzan para satisfacer las demandas de la misma sociedad. Eso se da por el envejecimiento de la población y se da por el aumento sistemático en el precio de los medicamentos. Ese es como el problema de base, uno podría decir que es la enfermedad crónica.

¿Y por qué se ha agravado la situación en el último año?
Lo primero, es que el sistema está más desfinanciado ahora de lo que estuvo en el pasado por decisiones del gobierno de Gustavo Petro; en particular una decisión muy grave sobre la Unidad de Pago por Capitación, que es lo que reconoce el estado colombiano por cada paciente en el año 2025. Cuando el gobierno decidió desechar la información y subirlo solamente en la inflación, agravó el problema de la salud en el país.
Segundo, es que el Gobierno tomó el control de la Nueva EPS, la más grande del país, con casi 12 millones de afiliados y un presupuesto de más de $20 billones; entonces la interviene y hay un gran desorden que ha venido creciendo, una inestabilidad en la red, decisiones caóticas, cambio en los interventores, cambio en el equipo, no saben para dónde van y ese problema de la Nueva EPS, sobre todo en el Valle del Cauca y en el Eje Cafetero, se ha manifestado en problemas cada vez mayor en la entrega de medicamentos. El otro problema está alrededor del Fomag, que es el subsistema de salud de los maestros en donde también el Gobierno ha tomado decisiones equivocadas y ha agravado la prestación del servicio.
Y el tercer tema es que con la reforma a la salud, con las declaraciones del presidente y con este intento deliberado de sembrar desconfianza, se está perdiendo como la idea de futuro; la gente no sabe para dónde va el sistema de salud, y eso también para muchos agentes está llevando a que los problemas se agranden y muchos agentes están diciendo ‘no puedo prestar servicios’. Los laboratorios farmacéuticos por ejemplo han reducido en un 30% los inventarios como resultado de esta incertidumbre. Si uno junta las tres historias, la historia del desfinanciamiento, la historia de la Nueva EPS y el Fomag y la historia de la ausencia de futuro y una reforma fallida, pues estamos en la mayor crisis en 30 años.
¿Qué hay detrás de esas filas enormes para reclamar medicamentos?
Creo que hay una escasez de medicamentos en lo que se llama el canal institucional en las EPS por estos problemas financieros y demás. No hay un desabastecimiento, pero sí hay escasez, sobre todo en algunas EPS, en particular la Nueva EPS, vuelvo y repito, como resultado de esos problemas financieros. Quiero decir algo sobre buscar culpables, y es que todos los gobiernos, sin excepción, en todos los sectores heredan problemas y tienen una responsabilidad primaria que es resolver los problemas. A mí me llamó mucho la atención que en el consejo de ministros de esta semana el Ministro de Salud no hizo ningún diagnóstico de los problemas del sistema, no mencionó las causas y mucho menos las soluciones; se dedicó a escarbar noticias viejas y a echarles la culpa a los demás gobiernos. Yo cuando era ministro de salud no tenía ni idea quién había sido mi antecesor diez años atrás y ayer, por ejemplo, desde una fuente institucional del Ministerio hacen un video mío de doce años atrás para tratar de eximirse de culpa; eso es irresponsable y me parece que es algo inédito en el país. Nunca habíamos tenido un Ministerio dedicado no a resolver los problemas, no a entender a la gente frente a una crisis creciente, sino a buscar culpables de una manera paranoide.

¿Cuál es la apuesta de este gobierno en temas de salud?
Lo voy a decir claramente y es que no saben para dónde van. Siempre tuvieron muy claro lo que deberían destruir, nunca tuvieron muy claro lo que tenían que construir. No saben muy bien qué van a sacar por decreto o no; por decreto no pueden hacer lo que tenía la reforma, no pueden liquidar las EPS y construir un solo pagador público en la Adres. Ya intervinieron las EPS y lo que nadie ha dicho en este debate, cuando el Gobierno critica las EPS es que desde hace más de un año el gobierno es responsable del 60% de los pacientes. O sea, hoy en día, en buena medida, las EPS son del Gobierno y siguen criticando las EPS con las que (transoca).
¿Qué tanto se ha politizado esta situación de la salud?
Creo que los debates sobre la seguridad social siempre tienen un componente político, pero aquí es político en un sentido malo: el gobierno lo que ha querido es crear un relato, crear una narrativa que sean eficaz políticamente, echarle la culpa a todos los otros, eximirse de cualquier culpa y no solucionar los problemas. Es político en el peor de los sentidos, el Gobierno solamente quiere crear una historia, una historia en la que ellos se victimicen, una historia basada en lo que a veces han llamado el estilo paranoide en la política, pero no hay soluciones. Todos los ministros de salud han enfrentado problemas, los enfrentan en todo el mundo, y este gobierno se desentiende de los problemas y se mete en esa mala política de buscar culpables.
¿Preocupa que haya salido el Gobierno a decir que no les debe nada a las EPS?
Me preocupa porque de alguna manera es una de esas ‘verdades a medias’. El tema no son solo las deudas a las EPS sino la insuficiencia de la Unidad de Pago por Capitación que la misma Corte Constitucional ha llamado. Hay deudas de la Adres con el sistema, incluso, del reajuste de los llamados presupuestos máximos del año 2022 y meses que no se han girado este año. O sea, esas deudas están ahí, el sistema está mal regulado, el Gobierno no ha calculado los parámetros del sistema para garantizar la sostenibilidad y hace un consejo de ministros y se dedica a eso, a construir una narrativa conveniente para ellos que en nada va a solucionar los problemas.
Es más, me parece que la incertidumbre y la desconfianza que se está generando con esas declaraciones y con esas mentiras le hacen más daño al sistema. Si yo fuera hoy en día el dueño de una clínica o administro una clínica y dicen que van a liquidar estas EPS lo primero que yo pienso es que no me van a pagar. Cómo voy yo a atender a los pacientes de esa EPS si el Gobierno está amenazando con la liquidación en tres semanas cuando no se apruebe la reforma en el Congreso; ese solo anuncio genera todo tipo de problemas en el sistema; uno tiene que proteger la confianza pública en un sistema de salud y el Gobierno está haciendo todo lo contrario.

¿Es intencional que salga el Presidente a decir que todos los actores del sistema son unos ladrones?
Vampiros, asesinos, ladrones; esos calificativos hacen un daño terrible al sistema de salud; Eso de que la gente cree que se están robando toda la plata; incluso, la misma cifra que mencionan de cien billones de pesos, es una cifra que descontextualizada parece mucha plata, pero lo que Colombia invierte por habitante al año, que son más o menos $600 dólares por persona al año, es un valor que es muy parecido al promedio de América Latina. Lo que Colombia tiene y lo que se reconocía en otros países es que con esos recursos invertidos al año tenía una protección que había incluido a todo el mundo y que era relativamente generosa en los beneficios, y todo eso se desconoce; los logros del sistema se desconocen y a mí me preocupa esto por dos razones: una, simplemente por democracia; uno no puede ir lanzando calumnias y epítetos y acusaciones sin sentido a todo el mundo. Hay gente que ha trabajado y además es un sector donde la gente trabaja abnegadamente; y lo otro, porque esa destrucción de la confianza afecta el funcionamiento de cualquier sistema.
¿En qué ha mentido el Gobierno en esta crisis de la salud?
Son cuatro mentiras: primero, me parece que lo del acaparamiento basado en una visita que se hizo a una bodega de medicamentos es una teoría de conspiración que no tiene sentido, que no tiene sustento. Si uno lee, incluso, los comunicados de la Supersalud, no lo que dice el Superintendente sino los comunicados, ni siquiera hablan de irregularidades; simplemente son unos hallazgos que todavía no se sabe muy bien qué es lo que significan. La segunda, cuando dicen que no se debe nada y que todo se ha hecho bien; eso desconoce la insuficiencia de la Unidad de Pago por Capitación y desconoce los atrasos en los presupuestos máximos.

La tercera, que me parece gravísima, es cuando el presidente Petro dice que el sistema de salud ha matado 300.000 personas y ha sido peor que los paramilitares; eso es una afirmación sin sustento, absolutamente insultante para todo el mundo que trabaja en el sistema de salud: los salubristas, los expertos en salud pública, las facultades de salud pública, todos los académicos le han dicho que está interpretando mal una cifra que construyó el Instituto Nacional de Salud hace unos años. Lo cuarto, que también resultó del consejo de ministros, es que basado en un tema del presidente y no entiende bien un dato y dicen que la cobertura en salud es cercana al 60%, cuando estamos cerca al 100% y eso fue amplificado por las redes sociales del gobierno; y la quinta, que es tal vez la que resume todos estos puntos, es que el Gobierno desconoce sistemáticamente los logros del sistema de salud en Colombia.
¿Cuál considera que es la salida a esta crisis de la salud?
La salida debería ser cumplir con los autos de la Corte. O sea, la salida, lo digo de manera clara, ya no es la reforma, la reforma así se apruebe en el Congreso se va a demorar dos años en implementarse. Es inyectarle recursos financieros, cumplir con los autos de la corte y generar confianza, invitar a los agentes del sector a trabajar para superar esta crisis; pero desafortunadamente el Gobierno no parece tener esa intención.
Regístrate gratis al boletín de noticias El País
Te puede gustar