Columnistas
Petro tuvo un febrero fatal
El agua no ha llegado a La Guajira porque los camiones que las transportaban enterraron sus llantas en las arenas.
A Álvaro Leyva le salió equivocada su estrategia para sacar del ring a una empresa seria que entregaba los pasaportes. Eso fracturó al gobierno y llevó a Petro al fracaso, cuando es muy vanidoso, algo muy humano. Este gobierno se impuso unos retos y lo derrotaron. Primer reto: llevar millones de litros de agua a la sedienta Guajira, zona sin carreteras, sin grifos ni gente entrenada.
Vía radial, supimos que el chamboneo venía saboteando el ‘proyecto de agua para la Guajira’. Segundo reto perdido: compraron los camiones a un señor que vende en su bodega cucuteña ropa usada, jabones, mentol chino, casetes, y de carambola, camiones con sobrecostos millonarios porque tiene unos padrinos poderosos.
El agua no ha llegado a La Guajira porque los camiones que las transportaban enterraron sus llantas en las arenas. ¿Cómo desenterrar los camiones? Solo hay una fórmula: botar el agua a las arenas calientes. Y en La Guajira son muchos los exfuncionarios presos por saquear dineros de la salud y la educación. Para reír: en La Guajira, un gobernador gastó 3.000 millones en cartillas enseñándole inglés a la etnia wayúu y a sus gentes, que ni hablan español. Punto.
Este gobierno y su ministro Álvaro Leyva contrató los pasaportes con la misma empresa que le cae mal a Petro, los hermanos Bautista, por ser de bogotanos, pero esos pasaportes en todos los aeropuertos del mundo los aprueban.
Joe Biden cometió el oso peludo de llamar ‘hijo de prostituta’ al poderoso Putin que tiene 787 bombas atómicas. Un insulto ordinario porque doña María Ivánovna Putin fue una señora respetable en Leningrado y Moscú. Biden resultó malhablado, como el guache Maduro, y en Boston y Nueva York eso sonó mal porque Estados Unidos es una potencia mundial.
Presidente Biden, ordinario ese madrazo, pero el bárbaro Putin debe ser colgado en la Plaza Roja de Moscú, como colgaron a Mussolini en Italia, los partisanos del coronel Badoglio. Este gobierno inició la campaña electoral del 2026 desde ayer. Lo hace porque gobernar es difícil con tantos ineptos en los ministerios. A Petro lo están rajando en las encuestas, un 60 % en contra y solo 38 % a favor. Pero aún tiene 857 días en el poder y con la chequera llena. A gobernar desde hoy, vivir aquí está carísimo, toca exigirle al gobierno y, colorín colorao.