Adolescente confesó haber asesinado a sus padres y a su hermano de 3 años; así ocurrió el crimen

Un adolescente de 14 años confesó haber asesinado a sangre fría a sus padres y a su hermano de tres años, en un crimen que ha conmocionado a la ciudad de Itaperuna, en el estado de Río de Janeiro en Brasil.

El crimen ocurrió el pasado sábado 21 de junio, pero no fue descubierto sino hasta el miércoles 25, cuando la Policía Civil encontró los cuerpos ocultos en una cisterna del predio familiar.

La denuncia por desaparición fue presentada por la abuela paterna del menor, quien acudió con él a la comisaría tras varios días sin lograr comunicarse con sus familiares.

Inicialmente, el joven intentó engañar a los agentes asegurando que su hermano se había atragantado con un vidrio y que sus padres lo habían llevado al hospital, de donde nunca regresaron.

Al no encontrar registros médicos que respaldaran su versión, las autoridades inspeccionaron la vivienda y hallaron rastros de sangre, ropa manchada y un fuerte olor a descomposición que los llevó hasta la cisterna. Fue allí donde encontraron los tres cuerpos.

Una confesión escalofriante

Tras el hallazgo, el menor confesó el crimen sin mostrar señales de arrepentimiento.

Según su testimonio, esperó a que su familia durmiera, tomó una pastilla de preentrenamiento para mantenerse despierto, y utilizó el arma que su padre ocultaba bajo el colchón para dispararles a ambos en la cabeza.

Luego, disparó a su hermanito en el cuello “para ahorrarle el sufrimiento de perder a los padres”, indicó el comisario Carlos Augusto Guimarães, jefe de la Delegación 143 de Itaperuna.

Después del crimen, arrastró los cuerpos hasta la cisterna usando productos de limpieza para eliminar rastros y guardó los celulares de las víctimas en su mochila.

Guimarães reveló que el joven dijo durante el interrogatorio: “Lo volvería a hacer”.

Amor virtual y dinero

Las autoridades investigan dos hipótesis sobre los motivos del crimen. Una apunta a que el menor habría reaccionado violentamente tras una discusión con sus padres, quienes se opusieron a que viajara a Mato Grosso para conocer a una joven de 15 años con la que mantenía una relación virtual iniciada a través de un videojuego en línea.

La otra hipótesis de investigación sugiere un móvil económico. Según los investigadores, el adolescente buscó en internet cómo cobrar beneficios sociales de personas fallecidas, específicamente el Fondo de Garantía por Tiempo de Servicio que su padre tenía acumulado por más de 33.000 reales.

En su celular también se hallaron búsquedas de empleo en la ciudad de Água Boa, donde vive la joven con la que mantenía la relación a distancia.

La justicia brasileña ordenó la internación provisional del sospechoso por 45 días, mientras avanza el proceso judicial, que se tramita bajo régimen de confidencialidad por tratarse de un menor de edad.

El joven será acusado de triple homicidio y ocultamiento de cadáver, y se ordenaron pruebas psicológicas para evaluar su estado mental. También serán analizados los teléfonos del adolescente y de su presunta novia para determinar si hubo algún tipo de complicidad.