Judicial
Habla Luisa Salgado, la falsa capitán del Ejército acusada de infiltrar la seguridad presidencial
La mujer asegura que durante años fue informante de la Fuerza Pública.

30 de sept de 2025, 12:28 p. m.
Actualizado el 30 de sept de 2025, 12:28 p. m.
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Como una “injusticia” calificó el proceso judicial en su contra Luisa Salgado, la mujer señalada de hacerse pasar como capitán del Ejército Nacional e infiltrar la seguridad del presidente Gustavo Petro.
La procesada, que fue judicializada junto a dos militares activos, aseguró en entrevista con Semana que durante ocho años trabajó como informante para la Fuerza Pública y que, por esa labor, recibía una remuneración.
Según su versión, su trabajo consistía en suministrar información sobre estructuras criminales como Los Satanás o el Tren de Aragua, con presencia en Bogotá. “Estaba trabajando como Uber en mis tiempos libres, en los otros apoyaba a Ejército“, dijo.

Salgado insistió en que buscará limpiar su nombre, pues asegura que tiene pruebas de que las acusaciones en su contra son falsas. “Lo que están haciendo conmigo es una injusticia”, manifestó.
Su esposo, el cabo del Ejército Lewis Cuello, también salió en su defensa. “Tenemos todas las pruebas para desvirtuar todo esto que se ha presentado. No es ninguna infiltrada, como lo han dicho. Todo lo que ella hizo con su trabajo fue ayudar a desvincular diferentes grupos armados”, aseguró.
La versión de la Fiscalía
De acuerdo con la investigación, Salgado integraría un entramado ilegal de infiltración en operaciones militares y de inteligencia en Bogotá y Cundinamarca, sin autorización de las autoridades competentes.
Junto a ella fueron capturados el mayor del Ejército Pedronel Jiménez Cárdenas y el sargento segundo Cristian Padilla Villanueva.
El ente acusador señala que, entre marzo de 2024 y abril de 2025, el mayor Jiménez, en su calidad de comandante de una unidad del Batallón de Fuerzas Especiales Urbanas No.5, habría permitido el ingreso de Salgado Fernández a instalaciones militares y su participación en operaciones tácticas y de inteligencia.
La mujer, haciéndose pasar como capitán, habría asumido funciones exclusivas de los oficiales, asistido a reuniones interinstitucionales y tenido acceso a información de carácter reservado, secreto y ultrasecreto.
Entre los datos que presuntamente obtuvo figuraban indagaciones en curso, esquemas de seguridad de altos dignatarios y procedimientos judiciales contra organizaciones criminales, incluido el Tren de Aragua.
Dentro de esta información también habría operativos para garantizar la seguridad presidencial y detalles sobre la configuración de los anillos de seguridad alrededor de la Casa de Nariño.
Mientras tanto, Padilla habría entregado detalles sobre los movimientos de la unidad y la logística para el uso de equipos de comunicaciones y drones en las misiones, lo que presuntamente permitió a la mujer acceder a información estratégica sin cumplir protocolos de seguridad.

En consecuencia, documentos oficiales, imágenes aéreas, planes de allanamiento y productos de inteligencia terminaron en manos de Salgado.
Parte de este material se habría utilizado para solicitar y ejecutar diligencias judiciales, lo que indujo en error a fiscales y jueces al creer que provenía de fuentes verificadas.
La mujer y los oficiales activos fueron imputados por concierto para delinquir agravado, simulación de investidura o cargo, revelación de secreto y fraude procesal, en atención a su posible participación en los hechos investigados.
Comunicadora social y periodista de la Universidad Autónoma de Occidente, con experiencia en medios digitales y en radio. En El País se desempeña como periodista multifuente desde el año 2022.