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Reiki: así es la técnica milenaria que sana mente, cuerpo y espíritu
Personas de todo el mundo dan fe de las bondades de esta práctica milenaria.
Miles o incluso, millones de personas en todo el mundo viven en una realidad llena de estrés y ansiedad. Ya sea por cuestiones laborales, por el tráfico, por su vida personal o por otras innumerables razones, este es un estado que afecta a los seres humanos, quienes han buscado diferentes métodos para combatirlo, como lo puede ser el Reiki.
Se trata de una práctica ancestral que ha tenido gran auge en el último tiempo y que, debido a esto, ha generado que el próximo martes 15 de agosto se celebrará el Día Mundial del Reiki. En este artículo, podrá conocer de qué se trata y cuáles pueden ser sus beneficios.
¿Qué es el Reiki y cómo funciona?
El Reiki es una terapia energética, la cual se basa en la creencia de que existe una energía vital universal que fluye a través de todo y que puede ser canalizada para sanar y equilibrar el cuerpo, la mente y el espíritu. Esta práctica tiene sus raíces en la antigua sabiduría oriental, más específicamente en Japón, país en el que Mikao Usui logró desarrollar el moderno sistema de Reiki, a principios del Siglo XX.
Para ejemplificar mejor esta metodología, en una sesión de Reiki, el terapeuta utiliza sus manos para canalizar la energía universal hacia el receptor. El proceso implica colocar las manos suavemente sobre áreas específicas del cuerpo o mantenerlas en una posición cercana. El propósito de esto es liberar bloqueos energéticos y promover un flujo armonioso de energía por medio de los chakras y los meridianos del cuerpo.
¿Cuáles son los beneficios del Reiki?
El Reiki brinda una serie de beneficios que pueden contribuir de forma significativa al bienestar personal. Sin duda, una de las principales bondades de este es la reducción del estrés y la ansiedad. La energía canalizada durante una sesión de Reiki puede ayudar a relajar la mente y liberar diferentes tensiones que se acumulan en el cuerpo, lo que a su vez puede tener un impacto positivo en el estado de ánimo y la claridad mental.
El Reiki también se ha asociado con la mejora del sueño. Muchas personas en todo el mundo aseguran haber experimentado un sueño más profundo y reparador después de recibir sesiones de esta práctica milenaria de manera regular. Esto se debe a la naturaleza relajante de la terapia y a su capacidad para equilibrar los sistemas energéticos del cuerpo.
Una de las formas en que el Reiki revoluciona el bienestar personal es incentivando una conexión más profunda entre el cuerpo y la mente. En la vida moderna resulta sencillo desconectarse de las diversas señales y necesidades del cuerpo debido al ritmo acelerado que hay. El Reiki ofrece un espacio para la introspección y la autoconciencia que permite a las personas reconectar con sus cuerpos y comprender mejor sus necesidades emocionales y físicas.
Más allá de sus ventajas, es importante recalcar que el Reiki no busca reemplazar a la medicina tradicional, sino más bien ser un complemento. Muchos de sus usuarios han encontrado que tomar terapias energéticas de este tipo, además de los tratamientos médicos convencionales, puede conducir a resultados más integrales. Así que, antes de acudir a este tipo de prácticas, lo ideal es consultar a un profesional de la salud.
El Reiki, entonces, trata de empoderar a las personas para que se conviertan en participantes activos en su propio proceso de curación y bienestar. Al acceder a la energía universal y aprender a canalizarla de buena forma, las personas pueden cultivar una mayor autoconciencia y autocuidado de sí mismas. De este modo, podrán garantizar un mayor porcentaje de satisfacción respecto a su salud y sus emociones.