Los abuelos y abuelas del Hogar San Vicente de Paúl de Popayán vivieron por todo lo alto la Semana Santa

Los abuelos y abuelas del Hogar San Vicente de Paúl de Popayán participaron activamente en las celebraciones de la Semana Santa, muestra de que el compromiso con Dios y su hijo Jesús permanece con el paso del tiempo.

“Como una familia, adelantamos cada momento de la Semana Mayor, donde ellos, nuestros abuelos participaron los actos religiosos que nos recuerdan la pasión y muerte del hijo del padre celestial, por eso con esa alegría y energías positivas adelantaron desde la procesión de Domingo de Ramos, el lavatorio de los Pies hasta la representación de Jesús camino al Calvario”, explicó Sandra Ibarra, directora de este hogar geriátrico.

Por eso, estos abuelos y abuelas recordaron su compromiso católico, y con el apoyo de las enfermeras y personal del hogar, participaron en las diferentes eucaristías y demás actos religiosos propios de la Semana Mayor, como fue el Santo Viacrucis de Viernes Santo, donde se delegaron los diferentes roles de los personajes de este importante momento de la historia.

Y es que para los adultos mayores, la Semana Santa es un momento de espiritualidad y tradición, donde son quienes mantienen vivas las costumbres religiosas, asistiendo a misas, procesiones y encuentros de oración.

“El Jueves Santo es una práctica común entre nuestros abuelos, así como la meditación en casa con películas religiosas o lecturas de la Biblia, también disfrutan compartir en comunidad, mostrando esa alegría tan poderosa que aún están en sus corazones, muestra de que el tiempo no una limitación, que cuando Dios permite la vida, siempre estarán las energías necesarias para agradecerle por su infinita bondad”, agrega la directora del Hogar San Vicente de Paúl, ubicado en pleno centro histórico de la capital del Cauca.

Porque estos espacios espirituales son de gran valor para ellos, porque son devotos del catolicismo, de ahí que agradecen profundamente estos momentos de fe y reflexión, además dentro del programa asistencial que se les brinda está el fortalecimiento de la parte espiritual, permitiéndoles así que expresen esas creencias libremente, gracias a esta clase de actividades.

“Una vez preparados para la Semana Santa, nuestros mayores, a pesar de todas las dificultades, impuestas por la diversidad funcional que a veces acompaña a los años, siguen activos participando de este momento lleno de significado para ellos, y como hogar que somos, les facilitamos los espacios necesarios para que cultivando esa fe y devoción”, acota la directora al exponer que los abuelos y abuelas estarán prestos siempre a celebrar todos momentos especiales del año.