Estos son los seis puntos clave que aún dividen al Congreso y al Gobierno en la reforma laboral

El Congreso de la República se prepara para votar en el Senado la reforma laboral en su cuarto y último debate, una reunión decisiva.

Con 19 artículos pendientes de aprobación, el proyecto está cerca de convertirse en ley, pero aún existen profundos desacuerdos entre el Gobierno y una parte del Legislativo que podrían definir el rumbo de esta actualización del régimen laboral colombiano.

Y es que esta reforma ha sido uno de los proyectos del Gobierno del presidente Gustavo Petro, quien ha insistido en que esta iniciativa es clave para mejorar las condiciones laborales del país.

Así avanza la aprobación de la reforma

Ahora bien, su aprobación antes del 20 de junio, cuando culmina el actual periodo legislativo, permitiría al Ejecutivo evitar la convocatoria de una consulta popular, una opción que ha estado sobre la mesa como plan alternativo en caso de que el Congreso no respalde el proyecto.

Sin embargo, los senadores aún deben resolver los puntos más polémicos del articulado, lo que ha generado un ambiente de alta tensión entre las bancadas, especialmente por la presión del tiempo.

A lo anterior, se le suma la necesidad de concertar con la Cámara de Representantes en la etapa de conciliación, un hecho fundamental.

Seis temas en debate

Aunque la mayoría del articulado ya ha sido aprobado, seis aspectos críticos siguen generando estos desacuerdos entre los políticos.

Uno de los más complejos es la estabilidad laboral reforzada, que busca proteger de forma más estricta a trabajadores con condiciones especiales, como discapacitados o madres cabeza de hogar, y que algunos sectores consideran excesivamente restrictiva para los empleadores.

Otro tema de discusión es el del pago de horas extras nocturnas, donde cerca de la mitad del Senado rechaza que esta carga se imponga a micro y pequeñas empresas, argumentando que podría comprometer su sostenibilidad financiera.

También sigue en discusión la propuesta de instaurar una jornada laboral de cuatro días a la semana bajo el modelo 4x3, iniciativa que enfrenta duda por parte de varios senadores que consideran que el sector empresarial aún no está preparado para asumir ese esquema.

Por lo que se prevé que, si se aprueba, sea bajo la condición de acuerdo entre empleador y trabajador, evitando su obligatoriedad general.

Otros puntos pendientes incluyen la remuneración dominical y festiva, el modelo de contrato de aprendizaje del Sena, y la regulación del trabajo parcial y monetizado, todos ellos con implicaciones significativas para la flexibilidad del mercado laboral.

Si el Senado logra aprobar los 19 artículos restantes este lunes, el paso siguiente será la conciliación con la Cámara de Representantes.

Finalmente, este proceso debe concluir antes del 20 de junio, fecha en la que finaliza la actual legislatura, para que el presidente Petro pueda sancionar la reforma como ley de la República.