El canciller de Colombia prevé “avances” en la COP 29, pero hasta ahora, dice, no hay ninguna “decisión de fondo”

El canciller de Colombia, Luis Gilberto Murillo, espera “avances” en la Conferencia sobre Cambio Climático que se abrió este lunes en Azerbaiyán, pero ninguna decisión de fondo, dijo este lunes a AFP, de paso por París rumbo a la COP 29.

La ciudad colombiana de Cali acogió hasta hace 10 días la COP 16 sobre Biodiversidad, que concluyó sin acuerdos sobre financiación de proyectos, el mismo aspecto que se debe debatir en Bakú hasta el 22 de noviembre.

Sin embargo, el canciller colombiano considera que aún es pronto para que se logre un pacto en este sentido, y apunta que habrá que esperar a 2025, a la próxima conferencia sobre el clima, en la ciudad amazónica de Belém do Pará, en Brasil.

Las negociaciones de la ONU sobre el clima buscarán fijar una nueva cantidad de ayuda que los países desarrollados, que históricamente emitieron más gases de efecto invernadero, causantes del cambio climático, deben entregar a los países más afectados. ¿Cree que se llegará a algún acuerdo?

Yo tiendo a ser optimista, pero en este caso no veo que vayamos a poder avanzar por la misma transición que se está dando a nivel global. Creo que esta es una COP que va a permitir avanzar, pero donde las decisiones de fondo tendrían que tomarse en la que viene. Y ‘de fondo’ quiere decir realmente en varios frentes, [incluyendo] cómo realmente se incentiva a los países de altas ambiciones climáticas.

Colombia es uno de los países con mayor ambición climática porque, teniendo unas reservas importantes de petróleo y una de las más grandes de carbón en el mundo, ha decidido no explorarlos.

Debería tener más incentivos para tener espacio fiscal que le permita avanzar rápidamente. De lo contrario, vamos a acabar con la humanidad, por un problema que nosotros no creamos, porque las emisiones provienen de los países del norte global. Y tienen una enorme responsabilidad.

Hay que hacer transformaciones de fondo más allá de la retórica. Y tenemos poco tiempo, hay que tratar esto es como una emergencia, ni siquiera una crisis”.

Para Colombia, ¿cuál sería el objetivo en la COP29?

Más allá de las cifras, lo planteamos en la COP16, es la articulación entre las convenciones hermanas. No se pueden tratar de manera autónoma, hay una relación interdependiente entre convenciones. No puedes hablar de respuesta a los desafíos de cambio climático sin pensar en la protección de la Amazonía o del Chocó Biogeográfico o del bioma del Congo.

Hay un muy buen ambiente para eso. Aspiramos a que eso se ratifique en la cumbre climática, en la COP29.

No avanzamos mucho en financiación en la COP16 porque la expectativa está en la COP29.

Queríamos avanzar más en los mecanismos financieros, hubo una gran discusión, pero esto es un ciclo, que inicia con la COP16, pasa por las reuniones del G20, la COP29 en Bakú, sigue con Belén do Pará y cierra con la COP17 que se realizará en Armenia.

En estos dos años necesitamos que se tomen decisiones de fondo.

Estamos en un momento de reconfiguración del orden mundial, donde Colombia, desde América Latina y desde los países del Sur, aspira y está jugando un papel principal.

¿De qué manera?

Colombia quiere ser un ejemplo de ambición climática. El gobierno presentó el plan de transición socio ecológica más allá de la transición energética, avanzando en otros sectores de la economía que nos permitan movernos de los (ingresos) energéticos basados en combustibles fósiles a los basados en renovables de fuentes no convencionales.

Ese plan nos cuesta 40.000 millones de dólares para los próximos 4 o 6 años. Tendremos [que hacernos cargo de] un porcentaje, pero se requiere el aporte de la comunidad internacional con distintas herramientas. Y por eso estamos planteando que se dé prioridad a las finanzas climáticas.

¿Cómo cree que puede impactar la elección de Donald Trump para la presidencia de Estados Unidos en las negociaciones?

Este es un asunto multilateral y lleva varios factores. La mayor amenaza a la respuesta que tenemos que dar a los desafíos globales, son las guerras y la incertidumbre del orden mundial que se está reconfigurando.

Colombia ha planteado hacer la paz con la naturaleza y la paz con nosotros mismos. Obviamente, Estados Unidos juega un papel central, confiamos en que las evidencias de la emergencia en materia climática lleven a Estados Unidos a tener una posición consecuente, a movilizar recursos, apoyar el convenio marco de cambio climático. Y esperamos que países que ya tienen la capacidad de aportar más también lo hagan.

Con información de AFP.