Este es el increíble aumento de multas de tránsito en Cali; ¿por qué los conductores no aprenden?

El martes 26 de noviembre se viralizó en redes sociales un video en el que dos pequeños camiones transportaban grandes contenedores en sus plataformas por la Calle 70, sector de San Luis. Lo que generó la repercusión fue que la mitad de las cargas quedaban en el aire, por su mayor tamaño comparado con el vehículo que las transportaba.

Luego, en la mañana del 28 de noviembre, otra grabación mostró cómo a un conductor de carro particular no le bastó con invadir el carril del MÍO en la Carrera 1, por las bodegas de la Licorera, sino que, además, lo hizo en contravía, por lo que tuvo que dar reversa varios metros para no estorbarle el paso al articulado.

La copa que rebosa el vaso en la última semana se la topó de frente el Tránsito, cuando sorprendió a varios conductores de motocicleta que circulaban ‘como si nada’ con placas modificadas, sin retrovisores, luz frontal ni prendas reflectivas.

Estos hechos se repiten cada día. Los caleños están acostumbrados, pero inconformes. De acuerdo con la recién publicada Encuesta de Percepción Ciudadana 2024 de Cali Cómo Vamos, casi la mitad de la población está insatisfecha con el cumplimiento de las normas por parte de los conductores (48 %), la cultura ciudadana (42 %) y el control ejercido a las normas de tránsito (49 %), como se ve en el gráfico 1.

Desde las autoridades se ha desplegado un mayor control operativo en lo corrido del año, lo que ha dejado ver que los caleños incumplen mucho más las normas de lo que se creía. Mientras en 2023 se habían impuesto poco más de 424.000 comparendos al 23 de noviembre, este año hasta la misma fecha ya van más de 717.000 multas, un incremento del 69 %.

En la última semana, a los carros los han sancionado más por exceder la velocidad, no acatar las señales de tránsito y estacionar en sitios prohibidos. A las motos, por su parte, las multaron más en ese periodo por conducir sin acatar las normas y no tener revisión técnico mecánica ni Soat. En la gráfica 2, el Top 10 de comparendos en el primer semestre del 2024.

Holbein Giraldo, sociólogo y docente universitario, explicó que el colombiano en general tiende a ser anómico, es decir, sin normas.

“Los ciudadanos consideran que las normas restringen su libertad. El otro factor es que Cali se ha convertido en una sociedad de migrantes, llegan personas de otras partes, lo que genera falta del sentido de pertenencia. Hay que enseñar la historia de Cali a las nuevas generaciones y trabajar en fortalecer la cultura ciudadana”, propuso.

Este panorama persiste hoy, pese a las políticas públicas. En junio del año pasado se aprobó y firmó la Política Pública en Cultura Ciudadana de Cali hasta el 2032, la cual enfoca parte de su trabajo en la convivencia, y uno de sus ejes estratégicos es la armonía con el entorno, donde se busca, entre otras acciones, promover el cumplimiento del Código de Tránsito.

Aún quedan ocho años para la completa implementación de la iniciativa, pero en el Concejo Distrital ven un avance lento. Roberto Ortiz, en su momento uno de los ponentes del proyecto, consideró que, sin la suficiente inversión, las políticas públicas se quedan en el papel.

“Pedagogía sí ha faltado, pero también es cierto que el ciudadano aprende es cuando le tocan el bolsillo. Nosotros, durante la preparación de la política, nos fuimos a las calles a hacer laboratorios y, cuando le decíamos a la gente con carteles grandes que no podían pasarse los semáforos en rojo porque podían ocasionar un accidente y se verá afectado su bolsillo, ya no se pasaban el semáforo”, contó.

¿Y el irrespeto a la autoridad?

En Cali, los ejemplos abundan como arroz. Nada más hace dos días las autoridades confirmaron un nuevo caso de agresión contra los agentes de Tránsito.

Un conductor que estaba siendo notificado de una infracción decidió atacar a tres guardas que realizaban controles al carril exclusivo del MÍO en la Calle 70 con Carrera 5N.

Los funcionarios tuvieron que ser trasladados a la Clínica Imbanaco para recibir atención médica.

De acuerdo con Wilmer Tabares, secretario de Movilidad de Cali, se han presentado más de 30 altercados con la ciudadanía en lo corrido del año, varios de los cuales han terminado en agresiones físicas.

“Esa es una cifra muy por debajo de lo que teníamos el año pasado, cuando por esta misma época ya íbamos por encima de los 70 altercados, o sea que sí ha mejorado en algo, pero falta. Venimos trabajando al interior de la Secretaría con nuestros agentes de Tránsito, porque la autoridad no se logra con discordia ni con discusiones a alto volumen y mucho menos cuando se pierde el respeto por el ciudadano. Es un trabajo que venimos haciendo en unas capacitaciones que les hemos ido brindando”, indicó Tabares.

Aun así, reveló que sí han venido presentando dificultades con los llamados “veedores”, los cuales están interfiriendo en los operativos de movilidad y han exacerbado a las ciudadanos, quienes terminan acudiendo al choque social para oponerse a los agentes de Tránsito en las vías.

“Vale la pena recordarles que ellos no pueden involucrarse en un procedimiento y mucho menos intervenir para que no se realice. Entonces, aquí sí hago un llamado, porque muchas veces lo que hacen es motivar a ese choque con la comunidad. Hemos tenido varias reuniones, algunos de ellos lo han entendido; otros todavía están en el proceso, pero creo que hemos logrado avanzar”, reconoció el Secretario.