En imágenes: así es el estado del puente de la Avenida Tercera Norte, en Cali; requiere intervención urgente

Circular por el puente de la Avenida Tercera Norte, ubicado frente al antiguo Seguro Social, genera temor no solo entre los habitantes de sector, sino de los miles de caleños que pasan a diario por este lugar, pues parte de la estructura pareciera tener graves afectaciones.

Esta estructura, que pasa sobre la Avenida Cuarta Norte, cuenta con un paso peatonal que no está señalizado y, lo más grave de todo, es que no cuenta con barandas de seguridad, por lo que ante cualquier paso en falso el peatón, que por allí transite, puede caer al vacío. Además, en las noches la iluminación es deficiente, lo que lo convierte en un paso inseguro que muy pocos ciudadanos deciden cruzar ya que generalmente hay habitantes de calle que han hecho del puente su hogar.

De igual manera, la malla vial del puente tiene graves afectaciones y, al pasar por debajo de la estructura, se puede observar que parte del concreto ya no está y hay acero a la vista.

“Yo no soy ingeniero, pero sí tengo la potestad de generar alertas y recomendaciones. El puente tiene un hueco en su parte inferior y eso indica que es posible que personas inescrupulosas hayan querido extraer hierro. Hay rasgos de que han querido vulnerar la estructura”, dijo el personero de Cali, Gerardo Mendoza.

El funcionario explicó que hasta donde él tuvo conocimiento, desde la Alcaldía de Cali le informaron que iban a intervenir los diferentes puentes de la ciudad, al igual como lo hicieron hace unos meses con la reparación de la estructura ubicada frente al Club Colombia, en la Avenida Segunda Norte.

“Yo venía protestando desde hace varios meses y, desde esa fecha se anunció la intervención de diferentes estructuras, entre ellas el puente frente al antiguo Seguro Social dada la situación que presentaba. La idea es que todas esas fallas estructurales de diferentes puentes, y de algunas instituciones educativas que también presentan deterioro en su infraestructura y que comprometen a la población, se capitalice dentro del empréstito que aprobó el Concejo de Cali al alcalde Alejandro Eder”, indicó el Personero.

Este puente tiene 11 metros de ancho en cada una de las calzadas y una longitud de 198 metros. La superestructura está conformada por losa y vigas en concreto reforzado, y la subestructura por 18 pilas de 1,35 x 1,60 metros altura promedio de 4,5 metros en concreto reforzado y que reciben las cargas vivas (vehículos) y muertas del puente.

El País habló con la Secretaría de Infraestructura de Cali para conocer cuál es la realidad del estado del puente y saber si se han hecho estudios al respecto.

“Es importante destacar desde esta dependencia que se evidenció que a este puente no se le habían realizado trabajos de mantenimiento preventivo en años anteriores y, de acuerdo con un análisis ejecutado por los ingenieros, se presentan algunos deterioros por impacto vehicular en su parte inferior y vandalismo en sus barandas. Además, se han encontrado afectaciones y corrosión en algunas paredes por cuenta de la posible orina de habitantes de calle”, respondieron desde la cartera de Infraestructura, organismo encargado del diseño y desarrollo físico de los proyectos de construcción de las vías, puentes o deprimidos viales.

¿Los daños que tiene el puente comprometen su estabilidad?

Según la Secretaría de Infraestructura, de acuerdo con el análisis técnico realizado este año, se evidenció que el daño identificado en la parte inferior de la losa obedece a un elemento no estructural por lo que no representa un peligro inminente para la estabilidad general de todo el sistema.

“Esto quiere decir que, de acuerdo con los expertos de la Secretaría de Infraestructura, el daño ubicado en ese sector está relacionado con la mampostería o estética de la estructura”, argumentaron.

En relación a la corrosión del concreto que hay en varias partes del puente, tanto en la zona vehicular como en la peatonal, afirmaron que esto ocurre por la presencia de dióxido de carbono producto del orín humano que reacciona con la humedad, generando descamación y desprendimiento del cemento.

“En relación a la ausencia de barandas metálicas a causa del vandalismo, ya se adelantan acciones para volverse a instalar y salvaguardar a los peatones, no obstante, la circulación de personas en este sector es escasa”, indicaron desde Infraestructura.

¿Ya hay fecha para la reparación del puente?

Los análisis realizados permitieron definir, de manera preliminar, que se debe reparar la losa inferior, o torta, mientras que para el arreglo de la pila afectada se debe retirar el área de concreto dañado y el acero corroído, luego se deben aplicar productos líquidos epóxicos (recubrimientos de alto rendimiento que ofrecen una protección integral contra el desgaste por uso rudo, derrames químicos, impactos y corrosivos) sobre la superficie del concreto con el fin de disminuir la porosidad superficial y aumentar la resistencia también superficial del concreto.

Desde la Alcaldía informaron que se planea instalar gálibos (luces de advertencia o intermitentes) en el puente como señal informativa para evitar posibles accidentes, especialmente, para advertir a los conductores vehículos de gran envergadura.

“También se incluirán barandales metálicos en toda la longitud del puente. Finalmente, se hará una pintura para mejorar la estética del mismo”, le indicaron a El País desde la Secretaría de Infraestructura.

Pese a que ya se tiene el dictamen de lo que requiere el puente, aún no hay una fecha definitiva para la reparación de la estructura que, sin duda alguna, debería ser una de las primeras en intervenir cuando se tengan listos los recursos.