Cáncer de colon: hábitos que ayudan a reducir el riesgo de desarrollarlo

El cuarto cáncer más común en el mundo es el cáncer de colon, pues según la Organización Mundial de la Salud (OMS), cada año se producen en la región de las Américas más de 240.000 nuevos casos y aproximadamente 112.000 muertes debidas a esta enfermedad. Como tal, este tipo de cáncer comienza en el intestino grueso, que se conoce como colon, que es la parte final del tubo digestivo y normalmente afecta a los adultos mayores, aunque puede ocurrir a cualquier edad.

Según los expertos de Mayo Clinic, el cáncer colorrectal o de colon, se desencadena con grupos pequeños y no cancerosos de células llamados pólipos que se forman en el interior del colon, pero con el paso del tiempo, algunos de estos pólipos pueden convertirse en cáncer de colon. Por ello, los especialistas en salud recomiendan acudir al médico para realizar pruebas de detección regular de estas células con el fin de prevenir el cáncer de colon mediante la identificación y extirpación de pólipos antes de que se conviertan en cáncer.

En cuanto a la sintomatología, la Universidad de Washington detalla que los principales síntomas de este padecimiento son el dolor abdominal, sangrado rectal, diarrea y anemia por deficiencia de hierro. Asimismo, indican que “el reconocimiento temprano de estos síntomas de alerta pueden mejorar la detección temprana y el diagnóstico oportuno del cáncer colorrectal de aparición temprana”.

¿Por qué se da el cáncer de colon?

De acuerdo con Mayo Clinic, este tipo de cáncer ocurre cuando las células sanas desarrollan mutaciones en su ADN. Estas normalmente suelen crecer y dividirse para mantener el funcionamiento del cuerpo, pero cuando una de estas células hace este procedimiento de forma incorrecta y continua dividiéndose, el material genético se acumula y forma una especie de tumor.

De esta manera, a medida que va pasando el tiempo, las células cancerosas pueden ir creciendo e invadiendo todo el organismo hasta destruir el tejido normal. “Las células cancerosas pueden trasladarse a otras partes del cuerpo para formar depósitos allí y hacer metástasis”, indica la institución médica.

Además de esto, existen distintos factores de riesgo que pueden aumentar el riesgo de cáncer de colon, entre ellos:

• Edad avanzada.
• Raza afroamericana
• Antecedentes personales de cáncer colorrectal o pólipos
• Afecciones intestinales inflamatorias
• Síndromes hereditarios que aumentan el riesgo de cáncer de colon
• Antecedentes familiares de cáncer de colon
• Dieta con bajo contenido de fibra y alto contenido de grasas
• Un estilo de vida sedentario
• Diabetes
• Obesidad
• Tabaquismo
• Alcohol
• Radioterapia contra el cáncer

¿Cómo detectar el cáncer de colon?

La Asociación Española contra el Cáncer detalla que cerca del 90 % de los cánceres de colon podrían ser curados si se detectan a tiempo. De este modo, este cáncer se puede detectar mediante una serie de toma de muestras y un estudio médico:

• Test de sangre en las heces: esta prueba determina la sangre en el tracto digestivo y permite exploraciones para detectar este tipo de cáncer.

• Exploración física: como tal, el tracto rectal determinará la presencia de anomalías físicas, bultos o dolor en el recto.
• Enema de bario con doble contraste: es un tipo de radiografía que se toma después de que el paciente se le haya aplicado un enema con una sustancia que permite delimitar la forma de la pared interna del colon.
• Colonoscopia: permite observar el interior del tubo digestivo por medio del tubo que se introduce por el recto y tomar muestras del tejido o de las lesiones sospechosas.

Hábitos para reducir el cáncer de colon

De otro lado, la misma institución señala algunas medidas para reducir el riesgo de padecer cáncer de colon. Estos son algunos de ellos:

• Consumir frutas, cereales y vegetales: este tipo de alimentos contienen vitaminas, minerales, fibra y antioxidantes que puede preservar la salud digestiva.
• Reducir la ingesta de alcohol: los expertos de Mayo Clinic aconsejan limitar las bebidas a una copa diaria en el caso de mujeres y dos en el caso de los hombres.
• Realizar ejercicio físico: lo ideal es practicar 30 minutos de ejercicio diarios.
• Mantener un peso saludable: es importante consultar al médico sobre la dieta que pueden consumir según el peso y la condición médica.