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El aceite vegetal que ayuda a reducir los triglicéridos naturalmente
El aceite vegetal tiene múltiples beneficios para la salud.
En la búsqueda de tener una alimentación sana y balaceada muchas personas cambian sus hábitos alimenticios e implementan diferentes alimentos a sus dietas. Este es el caso caso de los aceites vegetales
Diferentes estudios e investigaciones científicas han logrado comprobar que existe un aceite vegetal, distinto al aceite de oliva y al de girasol, que contiene harto omega-3, y permite hacer frituras más sanas. Este producto es ideal para reducir el colesterol, ya que ayuda a reducir los triglicéridos. Sin embargo, este aceite no es el más conocido.
El aceite de oliva es el más usado para condimentar, y está comprobado que previene algunas afecciones cardíaca. No obstante, no es el aceite vegetal que contiene más omega-3.
Según un estudio de la Universidad Central de Venezuela, es uno de los productos más sanos del mundo, y se trata del aceite de canola o colza y resulta ser un perfecto sustituto para los productos tradicionales, ya que posibilita freír y preparar alimentos muy saludables.
La canola es la segunda planta oleaginosa más cultivada en el mundo, y se utiliza en la fabricación de aceite para ensaladas y frituras, así como también margarinas, mantecas y otros productos alimenticios de origen vegetal.
La profesora en química de la Universidad Central de Venezuela, María Isabel Giacopini de Zambrano, publicó un artículo en el que mencionó las ventajas que tiene este alimento para el cuerpo humano.
En la investigación realizada por la experta venezolana remarcó que el aceite de canola cuenta con varios beneficios para el organismo.
- Es antiinflamatorio, a diferencia del maíz que es pro- inflamatorio.
- Es ideal para prevenir y controlar enfermedades promovidas por la inflamación.
- Reduce el riesgo de muerte cardiovascular en supervivientes a un primer infarto de miocardio y recurrente.
- Actúa sobre enfermedades como la aterotrombosis, fibrinólisis, inflamación y lípidos plasmáticos en pacientes con patología arterial periférica crónica.
