Política
Alfonso Prada aseguró que no ha existido tráfico de influencias con el exsenador y primo de la primera dama, Mario Fernández
El embajador de Colombia en Francia reconoció que sí se reunió con Fernández, pero sin intenciones de este tipo.
Las conocidas reuniones que ha sostenido con diferentes ministros el exsenador liberal Mario Fernández Alcocer, quien además es primo de la primera dama Verónica Alcocer, han despertado suspicacias y sospechas de un presunto tráfico de influencias en el gobierno de Gustavo Petro.
Al que fuera parlamentario entre 2014 y 2018 se le ha visto con notable cercanía con varios funcionarios de la Casa de Nariño y, de hecho, se conoció que tuvo una reunión en la oficina de Alfonso Prada cuando este aún era ministro del Interior. En días recientes, Fernández ya explicó que no había nada raro en todo esto y que se podía estar malinterpretando.
“Soy un actor regional en Sucre hace años. Le colaboro a la primera dama en algunos temas en específico y el escenario donde estoy permite que proyectos importantes para el desarrollo de Sucre estén en la agenda de la que hablo informalmente con ministros, pidiendo que no olviden a una región relegada”, manifestó el exsenador a El Tiempo.
Esto podría ser cierto, dado que ahora se reveló que Fernández aspirará a la Gobernación del mencionado departamento de la costa Atlántica, sin embargo, el exministro del Interior y ahora embajador de Colombia en Francia, Alfonso Prada, ya salió a entregar su versión de lo ocurrido.
En diálogo con el medio en mención, Prada manifestó, igual que Fernández, que no es cierto que se esté incurriendo en un tráfico de influencias y aseguró que la charla que tuvo con el exsenador en su despacho no era para nada más que discutir con este sobre su conocimiento en la rama Legislativa, así como para abordar temas en común sobre el plan de gobierno de Petro, encuentro en el que también estuvo la esposa de Fernández y senadora por Cambio Radical (de oposición), Ana María Castañeda.
La idea era “entender mejor la situación política del país”, según concluyó al medio nacional el exministro del Interior.
Como Prada, también dio explicaciones el ahora ministro de esta cartera, Luis Fernando Velasco, quien aseguró que su relación con Fernández Alcocer no inició con el gobierno de Gustavo Petro, por lo que no tiene nada extraño su cercanía. De hecho, señaló que su relación es buena desde el partido Liberal, al que ambos han pertenecido.
Sobre los encuentros, detalló que estas se han realizado con el fin de dialogar sobre diferentes preocupaciones del territorio nacional, y ejemplificó que en una de ellas se tocó el tema de la crisis humanitaria en la subregión La Mojana a causa de la ola invernal, sobre la cual manifestó que “hicimos algún tipo de gestión para ayudar en su momento a buscar alguna respuesta”.
Y una vez más, se insistió en la idea en que no se configura ningún tráfico de influencias, pues el exparlamentario actuó en calidad de líder de la región a la que representa, mientras los ministros lo hicieron en calidad de escucha como representantes del gobierno a las preocupaciones de Fernández.
¿El Gobierno está buscando seducir a la oposición?
El partido Cambio Radical, encabezado por el líder político Germán Vargas Lleras, se encuentra en medio de una investigación que involucra a dos congresistas que presuntamente favorecen al Gobierno. Entre ellos se encuentra Ana María Castañeda, una senadora sincelejana que es esposa y heredera política de un primo de la Primera Dama.
El Gobierno de Gustavo Petro parece haberse especializado en generar disputas dentro de los partidos como el Liberal y el Conservador, que en un principio se declararon aliados, pero ahora son contradictores. Todo indica que el petrismo busca aplicar la misma estrategia divisoria en otras agrupaciones que le hacen oposición, como Cambio Radical. Este es uno de los casos para conocer cómo actúa el poder petrista y gana adeptos incluso entre sus contradictores naturales.
Dentro de este partido, liderado por Germán Vargas Lleras, se percibe cierta incomodidad debido a que dos congresistas han ignorado los acuerdos internos para favorecer los intereses de la Casa de Nariño en el Capitolio. Uno de ellos ha levantado sospechas por sus vínculos y antecedentes que señalan una evidente cercanía con el Gobierno. Lea completa esta nota en este enlace.