Editorial
Alegría y paz en diciembre
Es tiempo de regocijo y celebración, de compartir en familia y con los amigos, de ser responsables para que las fiestas de fin de año transcurran en paz y armonía para todos.
Con la alborada que se celebra en la madrugada de este domingo, 1 de diciembre, comienzan las fiestas navideñas y de fin de año. Es una época de alegría, para disfrutar en familia, compartir con los seres queridos y gozar de los eventos organizados en Cali, en el Valle del Cauca y en el resto del país. La recomendación, como se hace siempre por este tiempo, es tener unas festividades tranquilas, en las que prime el buen comportamiento para que transcurran sin contratiempos.
Durante los 31 días de este mes se celebran fechas arraigadas en las tradiciones locales como el Día de las Velitas, el próximo 7 de diciembre; las novenas a partir del 16; la Navidad y el Año Nuevo, así como la Feria de Cali, que entre el 25 y el 30 de diciembre convierte a la ciudad en una sola fiesta cultural de la que gozan propios y visitantes.
Las medidas de seguridad y protección para los ciudadanos ya están en marcha. Además del acompañamiento de las autoridades locales y de la Policía en las calles y en aquellos lugares donde se prenderá el alumbrado navideño el próximo 6 de diciembre, el llamado a la ciudadanía es a la prudencia.
Entre otras disposiciones, la venta de pólvora estará restringida en Cali y en la mayoría de municipios del departamento, al igual que la manipulación de los fuegos artificiales que debe dejarse en manos expertas y autorizadas para ese fin. En particular hay que cuidar a los menores de edad, responsabilidad que recae en primer lugar en los padres de familia o en los adultos con quienes conviven.
En la capital del Valle durante las festividades decembrinas de 2023 hubo 32 casos de quemados con pólvora, de los cuales 7 eran niños o adolescentes, un incremento del 39% con respecto al año inmediatamente anterior. Son cifras que preocupan pero sobre todo indican que las campañas de prevención o de coacción no son suficientes, por lo cual es necesario educar desde temprana edad a la sociedad para que se comprendan los riesgos y las consecuencias, muchas veces trágicas, de una actividad que está prohibida.
Así mismo, se debe insistir en la sensatez con el consumo de bebidas alcohólicas durante esta época del año. La mayoría de los accidentes viales, de las riñas callejeras, de los hechos violentos o de los problemas de convivencia ciudadana, tienen su origen en el consumo de licor. Es posible vivir estas fiestas de forma alegre, sin cometer excesos o exponer la integridad personal o de terceros.
Que este sea un diciembre tranquilo y feliz para los caleños, los vallecaucanos y en general para los colombianos. Que se brinden las medidas de seguridad necesarias, se protejan los espacios públicos y se realicen los controles requeridos para evitar desmanes o tragedias. Es tiempo de regocijo y celebración, de compartir en familia y con los amigos, de ser responsables para que las fiestas de fin de año transcurran en paz y armonía para todos.