Columnistas
Creer, arriesgar, crecer
En esta época que para muchos es la oportunidad de celebrar a sus seres queridos con obsequios, apoyemos lo nuestro, apoyemos el talento nacional y el emprendimiento.
Aunque desde el siglo XVIII el emprendimiento ha sido objeto de estudio, solo dos siglos después empezó a considerarse como un factor importante de crecimiento económico de los países.
Colombia ha experimentado un auge en el surgimiento de emprendimientos exitosos en diversos sectores, impulsando la innovación, generando empleo y contribuyendo al crecimiento económico. Según el Global Entrepreneurship Monitor (GEM) - Monitor Global de Emprendimiento que analiza la actividad emprendedora en diversos países, el nuestro, es uno de los países de América Latina con mayor actividad emprendedora y por ello es cada vez más común que escuchemos hablar en nuestro entorno de emprendimientos exitosos que van desde los pequeños o microempresas, los escalables que buscan expandirse a mercados internacionales, pasando por los llamados start ups - empresas emergentes que se basan en la innovación y la tecnología, hasta los emprendimientos sociales que privilegian objetivos de transformación social.
Los emprendedores gozan de características muy particulares que están abanderadas por su capacidad de asumir riesgos, y acompañadas de innovación, iniciativa, liderazgo y creatividad, lo que les permite identificar las oportunidades para desarrollar modelos de negocio alrededor de productos o servicios que el mercado reclama. Pero, además, son generadores de empleo, gozan de autonomía, de libertad de propósito y de importantes satisfacciones personales al ver sus ideas convertidas en proyectos exitosos. No obstante, el emprender genera riesgos y retos importantes, como el temor al fracaso, la formalización empresarial, la búsqueda de capital semilla y de financiamiento, aumento de responsabilidades y de carga laboral, entre muchos otros; pero si estos riesgos han sido calculados, si responden a un estudio serio del mercado, a objetivos claros, a un modelo de negocio plenamente diseñado y aprovecha las ventajas tecnológicas disponibles, puede dar paso a grandes empresas.
Con su traje rosado -que para sus creadores representa alegría, fortaleza y amor- Buró es una plataforma para emprendimientos que se ha convertido en la vitrina más importante de este tipo a nivel nacional, con 24 ediciones desde el año 2013. Dos ediciones anuales en Bogotá y una Cartagena les han permitido consolidar una curaduría que privilegia la calidad, la innovación y la pasión de los emprendedores.
La Feria Buro llegó por primera vez a Cali y podremos disfrutarla hasta el próximo domingo en la emblemática Tertulia, como una oportunidad maravillosa para deleitarnos con la capacidad, el ingenio y la creación local y nacional. En nuestra ciudad contaremos con 87 emprendedores, la mayoría caleños, entre artistas, chefs, diseñadores de moda, diseñadores industriales; con exhibición y venta de ropa, accesorios, decoración, arte, bisutería, joyería y gastronomía; los cuales expondrán sus productos en medio de diversas alegorías de la ciudad, que fueron inspiradas en los recuerdos de infancia de María Alejandra Silva, su creadora y que traen imágenes de caña, chontaduro, música y baile.
Apoyar los emprendedores dentro y fuera de este evento es promocionar el talento joven, favorecer el crecimiento de la economía y la generación de nuevos y mejores empleos, es creer en el producto local y nacional, es decirle si a la innovación. En esta época que para muchos es la oportunidad de celebrar a sus seres queridos con obsequios, apoyemos lo nuestro, apoyemos el talento nacional y el emprendimiento.