Erika Kirk, viuda de Charlie Kirk, publicó un duro video en el funeral de su esposo: “No saben lo que acaban de encender”

“No tienen idea de lo que acaban de encender dentro de esta esposa”, esas fueron las palabras con las que Erika Kirk, viuda del activista estadounidense Charlie Kirk, se refirió al asesinato de su esposo.

A través de una publicación de Instagram, en la que compartió fotos y videos del funeral del político, la mujer hizo énfasis en que su lucha no concluiría con su fallecimiento y que sería ella la encargada de continuar con ese legado.

“El mundo es malvado. Pero nuestro Salvador. Nuestro Señor. Nuestro Dios. Él... él es tan bueno. Nunca tendré las palabras. Nunca”, inició Erika en su mensaje.

En esa línea, manifestó que “el sonido de esta viuda llorando sonará como un eco por todo el mundo, como un grito de batalla. No tengo ni idea de lo que esto significa. Pero bebé, sé que tú lo haces y nuestro Señor también”.

Erika señaló que si pensaban que la misión de Charlie era grande, ahora no tendrían idea de lo que se avecinaba, pues recalcó que se ocupará de que nunca lo olviden por la misión que desempeñó en vida.

“Todos ustedes, nunca, jamás olviden a mi esposo. Me aseguraré de ello”, agregó.

Este reciente pronunciamiento de la viuda del activista se suma a las declaraciones dadas en una transmisión en vivo junto a la silla vacía que su esposo utilizaba en las grabaciones de su pódcast.

“Los malvados responsables de la muerte de mi esposo no tienen idea de lo que han hecho”, dijo entre llantos Erika, y subrayó que “el movimiento que mi esposo construyó no morirá. No lo hará. Me niego a permitir que eso suceda”.

Erika calificó a su pareja como el padre y esposo perfecto, por lo que le envío un mensaje de despedida tras su deceso.

“Descansa en los brazos de nuestro Señor, bebé, mientras te cubre con las palabras que sé que tu corazón siempre se esforzó por escuchar: ‘Bien hecho mi buen y fiel siervo’”, concluyó la mujer en la publicación.

Charlie Kirk, un influencer republicano de 31 años, murió el pasado miércoles tras recibir un disparo mientras debatía con estudiantes en la Utah Valley University, en el suburbio de Orem.

El cuerpo del activista fue trasladado a Phoenix, Arizona, en el avión del vicepresidente JD Vance, quien ayudó a cargar el ataúd, con su viuda a bordo.

El asesinato de Kirk tuvo un gran impacto en la clase política y los activistas conservadores en Estados Unidos.