Transportadores y personal médico en Cali denuncian hurtos durante la cuarentena

Las denuncias por hurto durante la cuarentena han disminuido en Cali. Sin embargo, hay algunos brotes de inseguridad que han sido denunciados, sobre todo, por el personal de la salud y el de transporte.

Solo el jueves pasado, por grupos de WhatsApp circularon varios mensajes sobre episodios de hurtos en la capital del Valle.
Uno de ellos advertía lo siguiente: “Hola, muchachos. Pendientes al que se vaya a meter por los lados del jarillón de Decepaz, están robando como loco. Ya han robado como a dos taxis. Tengan cuidado”.

La respuesta a ese audio fue otra denuncia: “Sí, es así. Yo fui a Puertas del Sol a dejar una encomienda a la estación de Policía y el mismo patrullero me dijo que saliera hacia la 103, que no cogiera otra vez a Decepaz porque estaban robando mucho por esos lados”.

Incluso, en un grupo del gremio de taxistas de la ciudad, narraron una de las modalidades como estarían cometiendo los hurtos en varias partes de Cali, no solo el oriente.

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Según el usuario: los ladrones, que no están en casa cumpliendo con la cuarentena, le atraviesan una bicicleta a los vehículos para que paren y luego poder cometer el asalto.

Al respecto, Johnny Rangel, líder de La Mancha Amarilla, dijo que “le estamos recomendando a los compañeros taxistas evitar algunos sitios o sectores de alto riesgo, ya que se han presentado algunos ataques a los vehículos para poderlos saquear o atracar a los conductores y a sus pasajeros”.

“Desde hace días también hemos estado recogiendo en el gremio unos mercados para repartirlos con los taxistas más vulnerables, pero ya se han presentado ataques contra los voluntarios que están entregando estos productos”, acotó Rangel.

Por su parte, Marcela Becerra, enfermera, contó que en días pasados a ella y una compañera las robaron dentro de un bus del MÍO, cuando iban a la Clínica Cristo Rey, norte de Cali.

“Cuando llegamos a la estación de San Pascual, donde no se ven casi policías, se subieron al bus (una T42) dos hombres con aspecto de habitantes de calle. Íbamos unas siete personas y de un momento a otro se nos acercaron los dos tipos y le dijeron a mi amiga que le entregara el celular. Uno tenía una cartuchera y pensamos que podría tener un arma. Luego se bajaron en otra estación del centro. No fue posible encontrar ayuda”, dijo la mujer.

Al respecto, las autoridades indicaron que se ha mantenido el servicio de vigilancia, e incluso se han aumentado los patrullajes. “Estamos en estaciones del MÍO y en barrios donde se han reportado hurtos”, informaron.

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